España seduce a China con la energía que obsesiona al mundo y da un pelotazo millonario

España seduce a China con la energía que obsesiona al mundo y da un pelotazo millonario

Andalucía será la región que se beneficie de este acuerdo.

Representación de una planta de hidrógeno verdeEvgeny&Karina Gerasimovi

China y España han llegado a un acuerdo por el cual una de las grandes empresas del gigante asiático va a llevar a cabo un proyecto destinado al desarrollo de la energía verde que actualmente es una de las más cotizadas del mundo: el hidrógeno verde.

El acuerdo implica una inversión de 2.000 millones de euros en la provincia de Huelva por parte de la empresa china Hygreen Energy, que trabajará junto a la española Cox Avengoa en la creación de una planta propia de producción de hidrógeno verde, así como la construcción de una fábrica en Málaga relacionada con este tipo de energía, y otra en Sevilla.

Además del impacto positivo de la inversión en términos ecológicos y sostenibles -el hidrógeno verde es considerado como el combustible del futuro-, también se traducirá en miles de puestos de trabajo en la región andaluza

En el acuerdo fue fundamental la figura del presidente de la Junta de Andalucía, Juanma Moreno, quien acudió a Pekín y pudo reunirse con los responsables de la compañía china en el parque tecnológico de energías renovables Daxing Zona Internacional.

Utilidades del hidrógeno verde

Esta creciente tecnología, sobre la que cada vez más países ponen el foco, es una de las más sostenibles y que menor impacto tiene en el medioambiente, requisitos fundamentales en los tiempos que corren, en los que acabar con las emisiones de gases de efecto invernadero se han convertido en una prioridad para infinidad de países.

Con este proyecto, España entrará de lleno en la vanguardia del 'nuevo mundo', y hay que destacar las principales utilidades del hidrógeno verde, ya que sirven para propulsar motores y para generar energía sostenible y libre de emisiones.

Titania
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Santander

Además, el hidrógeno se trata de uno de los elementos más solicitados en todo el mundo gracias a sus beneficios energéticos, aunque el principal problema radica en el elevado coste de sus infraestructuras, ya que se trata de uno de los combustibles más inflamables y difíciles de transportar y almacenar.