A quién votan los jóvenes en Madrid
Isabel Díaz Ayuso ha logrado un gran tirón entre el electorado de derechas, incluidos los menores de 45 años, a los que su partido parecía incapaz de llegar.
“La mayoría de los jóvenes españoles son del PP aunque aún no lo sepan”. El presidente del PP, Pablo Casado, utilizó esta frase en la apertura del XV congreso de Nuevas Generaciones, con mucha intención y con la vista puesta en las elecciones a la Comunidad de Madrid que se celebrarán el próximo 4 de mayo.
A pesar de que pueda sonar extraño, el líder de los conservadores ha pronunciado esa misma frase en multitud de ocasiones. La hemeroteca guarda muchos ejemplos en su trayectoria política, incluso de hace 10 años, en 2011, cuando estaba al frente de NNGG en Madrid y aspiraba a un escaño en Ávila. ¿Es realmente así? ¿Los jóvenes españoles son del PP? ¿Y los madrileños?
Los expertos señalan que tradicionalmente el PSOE era quien conquistaba el voto joven en las elecciones generales. Salvo contadas excepciones —como la victoria de Aznar en 1996— los nuevos votantes escogían una y otra vez la papeleta del puño y la rosa. Su apoyo fue clave para que Felipe González y José Luis Rodríguez Zapatero llegaran al palacio de La Moncloa.
Ese idilio se rompió hace 10 años con la irrupción del 15-M —donde uno de sus lemas más populares fue “no nos representan”—, la aparición de nuevos partidos y el final del bipartidismo. La volatilidad se instauró en la política española, especialmente en esta parte de la población. Los jóvenes cogieron las papeletas de Podemos en los comicios de 2015 y 2016 u optaron por las de Ciudadanos en 2018 y 2019.
Tras una larga travesía por el desierto, Pedro Sánchez logró hacerse con el favor de los nuevos votantes con edades entre 18 y 24 años en los últimos comicios, aunque la generación que vivió el 15-M se le resistía. Sin embargo, el PP no lograba conectar con los menores de 45 años, ni siquiera tras la elección de Casado como presidente. Vox se estaba haciendo fuerte en este nicho de votantes desde los últimos comicios.
Ante este escenario, Génova tomó cartas en el asunto en el último congreso de su organización juvenil, que supuso el relevo en la presidencia del gallego Diego Gago por la vizcaína Bea Fanjul. Un giro de la moderación al ala dura que se interpretó como un movimiento para competir por el voto joven con el partido de Santiago Abascal.
El fénomeno Díaz Ayuso
Todo este escenario cambió con la decisión de la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, de adelantar las elecciones para el próximo 4 de mayo. Unos comicios de alto voltaje que tendrán consecuencias en la política nacional.
Si hace dos años Ayuso era una desconocida para los madrileños, ahora lidera todas las encuestas a gran distancia de sus rivales, gracias a un trabajo de comunicación durante todo este tiempo y a sus enfrentamientos constantes con Pedro Sánchez durante la pandemia.
Estos comicios no tendrán nada que ver con los anteriores, celebrados en 2019. “Los jóvenes están cambiando su voto. Los más jóvenes votaron hace dos años a PSOE y Más Madrid y los jóvenes más veteranos a Podemos. Una parte de los jóvenes que votaron a Ciudadanos ahora se han pasado al PP”, asegura la consultora política Ana Salazar, directora de Idus 3.
Esos cambios en el electorado dejan un claro ganador. El PP se convertiría en el partido más votado en cualquier franja de edad en la Comunidad de Madrid, según la encuesta flash publicada este jueves por el CIS. “La fortaleza de Ayuso es evidente: consigue ser la opción preferida en todas las franjas de edad, superando el 20% en intención directa de voto en todos esos grupos”, asegura el politólogo Silvio Falcón, profesor asociado de ciencia política en la Universitat de Barcelona.
Ayuso lograría hacer realidad ese sueño de Casado de que los jóvenes son del PP, aunque no lo sepan. El 20,1% de los votantes entre 18 y 24 años y el 25,4% de los electores entre 25 y 34 años meterán la papeleta del partido conservador en la urna el próximo 4 de mayo, según este sondeo del CIS.
Únicamente, Más Madrid logra hacerle algo de sombra al cosechar el apoyo del 17,9% entre los primeros y del 15,3% entre los segundos. El resto de partidos no llegan el 10% de los votos en ninguna de estas dos franjas de edad, cuando antiguamente eran sus nichos.
Si se mira la variable voto + simpatía, la popularidad de Ayuso se dispara todavía más: un respaldo del 26,1% entre los jóvenes entre 18 y 24 años y del 23,9% entre los jóvenes de 25 y 34 años. Al igual que antes, Más Madrid se alza como la segunda opción con un 23,9% y un 21,6% de apoyos, respectivamente.
Así se repartiría el voto + simpatía entre los diferentes partidos:
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Los expertos apuntan a una circunstancia curiosa en estas elecciones madrileñas. El apoyo a Ayuso no se traduce en una mayor popularidad del PP. “Los jóvenes se identifican mucho más con Más Madrid y, sin embargo, el voto se va al PP. Se nota claramente que hay un voto a la candidata. La simpatía de los jóvenes a Más Madrid en la encuesta preelectoral era del 19,2% entre 18 y 24 años y de 13,8% en los que tienen entre 25 y 34 años, la más alta que había. La simpatía del PP era menor al 7%”, explica Salazar.
Tampoco existe una identificación ideológica de los jóvenes con el PP, ya que se siguen manifestando mayoritariamente de izquierdas. “No se acercan ideológicamente al PP cuando se les pregunta en qué punto de la escala ideológica se sitúan. Los jóvenes se proyectan en el centro izquierda, en el 4,6, y al PP lo sitúan en torno al 7,5. Hay tres puntos de diferencia”, señala.
Más Madrid crece entre los más jóvenes
Otra de las sorpresas de la campaña la ha dado Más Madrid, que, a tenor de las encuestas, ha sabido mantener su apoyo, a pesar de la irrupción por sorpresa de Pablo Iglesias como candidato de Unidas Podemos y del posible efecto Moncloa que pudiera beneficiar al PSOE, como pasó en Cataluña.
La campaña ya ha hecho cierta mella en los apoyos, si se compara con la encuesta preelectoral publicada a principios de abril. La candidata Mónica García ha logrado atraer a posibles votantes socialistas, decepcionados con la campaña centrista desplegada desde Moncloa para intentar pescar en el caladero de votos de Ciudadanos. Su gran hándicap es el poco conocimiento de su cabeza de lista por parte de los electores.
“La intención de voto del PSOE en los jóvenes de 18 a 24 años ha disminuido considerablemente del 10,9% en la encuesta preelectoral al 6% en la encuesta flash. Este voto se está desviando a Más Madrid, que tenía 14,6% en la primera y ahora tiene el 17,9%. Más Madrid está capitalizando el voto de los más jóvenes de la izquierda”, apunta Salazar.
La formación ultraderechista Vox ha sido consciente de que la popularidad de Ayuso podía poner en peligro su representación y, por eso, ha diseñado una campaña electoral con impactos —como Vallecas, el cartel de Cercanías o los debates— y muy centrado en las redes sociales —especialmente Instagram—, que tanto rédito le han dado en el pasado. El objetivo es atraer y mantener a ese votante joven.
“Vox detectó que estaba perdiendo voto joven y por eso, el cartel de los menores no acompañados dice ‘tu abuela’ y no ‘tu madre’, es decir, no se dirige a una persona de 40 años, sino de 20 o 25 años”, señala Salazar.
Gracias a esa campaña, Vox ha logrado frenar su fuga de votos hacia Ayuso y ha empezado a crecer entre los jóvenes. “El apoyo a Vox ha aumentado entre la encuesta preelectoral y la encuesta flash. La formación está capitalizando el voto del PP y de Ciudadanos de los jóvenes de 18 a 24 años”, afirma.
Todavía no hay nada decidido, ya que queda más de una semana para la celebración de los comicios. Los expertos recuerdan que todavía queda mucho voto indeciso, especialmente entre los jóvenes, de cara al 4-M. “Un 28,4% de los jóvenes entre 18 y 24 años afirman no tener decidido su voto. Este grupo de edad puede decantar la elección si hay una movilización relevante, si se tiene en cuenta los escasos márgenes que ofrecen las encuestas a ambos bloques para alcanzar la mayoría parlamentaria”, remata Falcón.