A contracorriente: el Descenso del Sella y la discriminación de la mujer
Tres son los argumentos que el director del Descenso Internacional del Sella puede ofrecer para justificar la prohibición de participar en la principal prueba al dúo formado por Manuel Busto y Beatriz Manchón, la que se denomina "hombres". El primero: dura lex, sed lex. Esto es, que la norma que regula la participación de hombres y mujeres en dicha competición es la que es. Es más, con la división en tres categorías no se impedía la participación de Beatriz Manchón y Manuel Bustos, pues podía competir en la categoría mixta. Por otro lado, Beatriz Manchón también puede participar en la de mujeres, obviamente.
El segundo argumento que justificaría la segregación histórica en las competiciones deportivas entre hombres y mujeres, y en este caso, la discriminación que sufriría la piragüista, es la diferente complexión física que podría originar en el caso de competiciones unificadas que las mujeres pudieran sufrir daños lesiones.
En tercer lugar, también basado en la diferente fisiología de las mujeres, estas tienen normalmente menos capacidad para obtener los rendimientos deportivos que alcanzan los hombres, así que igual que se segrega por edades, pesos u otros factores, también parece razonable hacerlo por sexos.
Pero ninguno de estos argumentos es suficiente para amparar el rechazo a dicha participación. Respecto del primer argumento, las normas que regulan una competición no están escritas en una piedra, sino que pueden ser modificadas. En este sentido, ya el año pasado se planteó esta cuestión y por ello, sorprende que en ese plazo de tiempo no hayan aprovechado para modificar la normativa y crear un competición que podría denominarse "senior" que diera cobertura también a las mujeres sin ningún problema.
En lo concerniente al segundo argumento, cabe decir que es sesgado, paternalista y falso. Sesgado porque si fuera cierto no se hubiera permitido debutar a Messi en Primera División con solo 16 años, pues corría el mismo riesgo que se predica de las mujeres. Paternalista, porque son las mujeres las que deberían decidir si quieren o no correr ese supuesto riesgo; y falso, porque en piragüismo ¿qué riesgo hay de sufrir una lesión?
Y por último, el argumento del diferente rendimiento deportivo, además de pecar de machista presenta otro problema, también es sesgado y falso: dadas las marcas que ha obtenido Beatriz Manchón estaría en las primeras posiciones en una competición con hombres.
Se me olvidaba, hay un último argumento, el de la inercia y el conservadurismo... pero superarlo exige ganas y pensar un poco. Como no ha habido tiempo para modificar la normativa este año, lo hay para la siguiente, como también para realizar un acto de contrición.