El 'alquiler inverso' emerge en plena crisis de la vivienda por sus beneficios fiscales
Se parece a la hipoteca inversa, pero en este caso conservas la propiedad de tu inmueble.
Los Presupuestos Generales del Estado del 2023 recogen algunos beneficios fiscales para las personas que apuestan por el alquiler inverso, una nueva forma de financiación que comparte similitudes con la hipoteca inversa pero que no es exactamente lo mismo.
El concepto de alquiler inverso tiene pocos años de vida, empezándose a acuñar en 2016 gracias a la ideación de la empresa Pensium. Aunque es más popularmente conocida la hipoteca inversa, el préstamo hipotecario diseñado para mayores de 65 años mediante el cual el propietario de una vivienda hipoteca su casa a cambio de un renta mensual o el abono de una cantidad de una sola vez, el alquiler inverso está ganando adeptos.
Al contrario de la hipoteca inversa, con el alquiler inverso, el propietario conserva la propiedad. En esta caso, la persona cede la vivienda a una empresa a cambio de unos pagos periódicos. Durante ese tiempo, la compañía se encarga de alquilar el inmueble, se queda con el dinero de dicho alquiler y así recupera el dinero prestado progresivamente.
Requisitos del alquiler inverso
La propuesta resulta bastante atractiva, pero no todo el mundo puede acceder a este alquiler inverso. Para ello tiene que poseer una vivienda en propiedad que se pueda alquilar, tener un grado II o III de dependencia por parte de la administración pública (reconocido ya o en trámite) y poder firmar el contrario (o haber cedido poderes o un tutor legal).
Sumado a ello, es de suma importante que los ingresos periódicos generados por el alquiler inverso se destinen exclusivamente a los gastos de asistencia, como puede ser el pago de una residencia.
Aspectos relevantes del alquiler impreso
Además de las características mencionadas, el alquiler inverso debe inscribirse en escritura pública en el Registro de la Propiedad para que tenga validez, las cuotas pueden acordarse entre propietario/s y empresa y no es necesario que el inmueble sea la residencia habitual, puede ser también una segunda vivienda en un destino vacacional.
Por su parte, este alquiler no tiene ningún tiempo mínimo de cumplimiento, pudiéndose cancelar en el momento en el que se desee por cualquiera de las dos partes.
Ventajas del alquiler inverso
Apostar por el alquiler inverso se traduce en numerosos beneficios fiscales para las personas mayores, entre los que destacan:
- Exención del pago del Impuesto sobre las Transmisiones y Actos Jurídicos Documentados
- Bonificación del 50% en aranceles notariales y rebaja del 90% de los gastos registrales.
- Otros beneficios en base a la normativa autonómica