Airbnb se rompe y su CEO pide bajar los precios
Brian Chesky, creador de la empresa, ha trazado un plan para "poner la casa en orden".
El gigante global del alquiler de viviendas vacacionales, Airbnb, tiene una brecha que desde el estallido de la pandemia se ha ido haciendo más y más grande. El CEO de la empresa, Brian Chesky, ha asegurado en una entrevista con Bloomberg que la compañía atraviesa una situación delicada como consecuencia de un crecimiento acelerado, una mayor oferta de pisos turísticos, pero una menor demanda.
Chesky, que asumió la responsabilidad de la situación que atraviesa Airbnb y admitió que la compañía no estableció adecuadamente los cimientos de la empresa para aprovechar el crecimiento. Aunque 2021 marcó máximos históricos en beneficios para Airbnb, el año pasado empezó a mostrar signos preocupantes y en 2023 se precipitaron los problemas.
A principios de este año, Airbnb tuvo que enfrentarse al fenómeno del Airbnbust, con protestas masivas de los anfitriones molestos por la reducción de los márgenes de beneficio y el temor a una posible burbuja en el negocio del alquiler a corto plazo. Las restricciones aprobadas en Nueva York durante el verano para frenar su actividad de agravaron aún más la crisis. Paralelamente, las ciudades españolas han ido mostrando su descontento por la invasión de los pisos de alquiler, lo que elevaba los precios y generaba molestias a los residentes locales.
El problema de Airbnb reside en los precios. La sobreoferta de viviendas con precios al alza no garantiza una mejora en los servicios, lo que ha ahuyentado a potenciales huéspedes. En contraste, su principal competidor, Vrbo, ha ganado terreno al centrarse en la satisfacción del cliente y ha implementado un programa de fidelización de usuarios, según explica el portal Directo al paladar.
Chesky ha trazado un plan para "poner la casa en orden" y pedirá a los anfitriones de Airbnb que bajen los precios de sus alquileres. Además, la compañía está desarrollando una herramienta para que los anfitriones puedan comparar precios con la competencia y los alojamientos hoteleros, permitiendo así ajustar sus tarifas. El objetivo es ofrecer precios más competitivos frente a los hoteles y recuperar la esencia que hizo grande a Airbnb.