Se llamaba Ahmed Merabet

Ahmed Merabet.

Así se llamaba el policía que los terroristas remataron salvajemente en el atentado de París. Era musulmán.

Ahmed Merabet, al que es posible que no le gustaran las sátiras sobre algunos aspectos de sus creencias, dio su vida defendiendo la libertad de todos para expresarse, y nos recuerda hoy aquella sentencia atribuida a Voltaire: "Estoy en desacuerdo con lo que dices, pero defenderé hasta la muerte tu derecho a decirlo".

Porque a Ahmed Merabet no lo asesinó otro musulmán: lo asesinó un terrorista.