Los periodistas de la agencia española EFE detenidos en Venezuela ya están libres
Finalmente no serán deportados.
Los tres reporteros de la agencia EFE que habían sido detenidos en Venezuela han sido liberados este jueves y no van a ser finalmente deportados, informó el citado medio.
"Los tres reporteros de la Agencia EFE detenidos en Venezuela, el español Gonzalo Domínguez Loeda y los colombianos Maurén Barriga Vargas y Leonardo Muñoz, están en proceso de deportación", señaló la agencia en Twitter.
Dos periodistas franceses, Pierre Caillé y Baptiste des Monstiers, del canal televisivo TMC, permanecen detenidos desde el martes, mientras dos comunicadores chilenos fueron deportados la noche del miércoles.
Sin mencionar las detenciones, el canciller venezolano, Jorge Arreaza, dijo que periodistas extranjeros han ingresado al país "sin cumplir previamente con la respectiva solicitud del permiso de trabajo" en los consulados.
"Es inaudito e irresponsable que medios de comunicación envíen periodistas sin cumplir con los requisitos mínimos previos que exige la ley de Venezuela, para luego armar un escándalo mediático al que se suman sus gobiernos. Otra faceta de la operación mediática contra el país", ha escrito Arreaza este jueves en Twitter.
Los reporteros de EFE, que habían ingresado a Venezuela el 24 de enero para cubrir la crisis política, fueron arrestados el miércoles junto con un conductor venezolano.
Más temprano, la Unión Europea (UE) había exigido la liberación de los periodistas detenidos "sin motivos" en Venezuela, según la jefa de la diplomacia europea, Federica Mogherini, en Bucarest. Los gobiernos de España y Francia se sumaron a la exigencia.
Barriga y Domínguez estaban en poder de agentes del Servicio Bolivariano de Inteligencia (Sebin) que los esperaban en el hotel donde se hospedaban, había indicado a la AFP la directora de EFE en Venezuela, Nélida Fernández.
Según la agencia, al ingresar por el aeropuerto internacional Simón Bolívar de Maiquetía, que sirve a la capital, sus colaboradores "declararon la labor periodística que iban a realizar".
Arreaza dijo que para "evitar inconvenientes innecesarios", los medios y agencias internacionales "deben realizar los trámites indispensables en los consulados, previo a su viaje al país".
La detención en Caracas de tres periodistas de la Agencia Efe y su conductor ha generado una condena unánime de Gobierno, partidos, dirigentes autonómicos, sindicatos y asociaciones de informadores por las prácticas que contra la prensa internacional se llevan a cabo en Venezuela.
En una primera reacción, el Gobierno español emitió un comunicado en el que rechazó "enérgicamente" la detención y aseguró que desde que tuvo conocimiento, a través de la Embajada en Caracas, se estaban haciendo "todas las gestiones necesarias para lograr su liberación a la mayor brevedad".
Unas gestiones corroboradas posteriormente por el ministro de Exteriores y Cooperación, Josep Borrell, quien, desde Bucarest, reconoció el "intenso" trabajo que se estaba haciendo por la liberación de los periodistas.
La puesta en libertad de los trabajadores de Efe fue reclamada desde el primer momento por los líderes de los principales partidos políticos españoles, como el presidente del PP, Pablo Casado, quien, además, denunció que esta situación no era "casual", sino que viene de atrás y forma parte de una "estrategia" del régimen chavista para acallar a los medios de comunicación.
Se da la casualidad de que Casado trasladó su condena durante la presentación de Antonio Ledezma, exalcalde metropolitano de Caracas y opositor venezolano, en un desayuno informativo que se inició con un mensaje de solidaridad hacia los periodistas detenidos.
En su cuenta de Twitter, el líder de Ciudadanos, Albert Rivera, aseveró que "la tiranía de Maduro sigue actuando, reprimiendo y violando derechos", la misma plataforma que utilizó el secretario general de Podemos, Pablo Iglesias, para calificar de "inaceptable" la detención y mostrar su solidaridad con "todos los trabajadores de la información a los que se persiga en cualquier país".
También el portavoz de PDeCAT en el Congreso, Carles Campuzano, lamentó "cualquier ataque a la libertad de expresión y ejercicio profesional de los periodistas", a la vez que consideró que las detenciones de estos profesionales en Venezuela son "una clara muestra de la ansiedad por el cambio político y de esas elecciones que los gobiernos europeos están exigiendo a Maduro".
Desde Vox también se criticó la detención de los periodistas y el trato dado a la prensa por el régimen de Maduro.
Reacciones similares sobre la detención de periodistas llegaron desde los gobiernos autonómicos. Así, el presidente de la Generalitat Valenciana, Ximo Puig, pidió una reflexión sobre la necesidad de defender la "libertad de expresión y prensa". Su homólogo madrileño, Ángel Garrido, mostró su "apoyo incondicional" a los detenidos, mientras que el de la Junta de Extremadura, Guillermo Fernández Vara, insistió en que "sin libertad de expresión no hay democracia, ni siquiera en la pantomima que hay en Venezuela".
Una crítica a la que se unieron todos los grupos parlamentarios, que aprovechando la comparecencia en el Congreso del presidente de Efe, expresaron su "enérgica condena" a las detenciones de los periodistas en Venezuela.
Distintas organizaciones de periodistas como la Federación de Asociaciones de Periodistas de España (FAPE) reclamaron el máximo respeto al ejercicio libre de su profesión, "claramente vulnerado" por el Gobierno venezolano.
En esta línea se pronunció la Asociación de Medios de Información (AMI), que agrupa a los principales editores de medios impresos y digitales en España, para la que las detenciones son un "intolerable atentado" a la libertad de expresión y urgió a las autoridades a adoptar medidas para proteger a los periodistas y a sus medios en el libre ejercicio de la profesión allá donde este derecho se vulnere.
Para la Federación de Sindicatos de Periodistas (FeSP) "las autoridades venezolanas deberían facilitar el trabajo de todos los informadores y no detenerlos, ni aplicar censura, como está ocurriendo".
En tanto que la Agrupación de Periodistas de UGT recordó el valor del trabajo que ejercen los corresponsales y enviados especiales para que la sociedad pueda estar informada con rigor, unas demandas a las que se unió el sindicato CSIF.
Y desde la Agencia Efe, su Consejo de Redacción subrayó que la libertad de información es un derecho fundamental, tal y como defiende la Organización de las Naciones Unidas (ONU), y que el ejercicio del libre periodismo es indispensable e irrenunciable para el sostenimiento y el desarrollo de la democracia.
Como muestra de apoyo a sus compañeros, los trabajadores de Efe se concentraron al mediodía de este jueves a las puertas de la sede central en Madrid y de sus centros de trabajo en las diferentes delegaciones con las que cuenta la Agencia.