La DGT endurece el castigo: esto es lo que propone hacerle a quienes usen WhatsApp al volante
El director general de Tráfico quiere recordar que España es un referente en materia de Seguridad Vial.
El director general de Tráfico, Pere Navarro, ha señalado que su departamento llevará al Congreso una propuesta para renovar el carné por puntos con un aumento de penalizaciones en infracciones como el uso del whatsapp al volante, que podría suponer la pérdida de cuatro o seis puntos, y la ausencia del cinturón o el casco, que quiere elevar de tres a cuatro.
Durante su primera comparecencia ante la Comisión de Seguridad Vial del Congreso en su vuelta a la DGT, Navarro ha desvelado algunas de las principales modificaciones que pretende llevar a cabo en este sistema que él mismo puso en marcha en 2006. Según ha explicado, tras 12 años de funcionamiento es necesario "revisarlo" para adaptarlo a nuevas costumbres y usos.
Como ejemplo ha puesto el whatsapp, una aplicación móvil que no existía hace una década y que es similar a otras de mensajería instantánea o redes sociales como Twitter o Instagram. Navarro ha señalado que, siendo actualmente una de las "principales causas de accidentes mortales en la carretera" su penalización debe aumentar, pasando de los tres puntos que se quitan por su uso en la actualidad hasta los cuatro o los seis.
La decisión quedaría en manos del Parlamento
El director de la DGT ha señalado que serán los propios diputados quienes decidan finalmente la mejor penalización en este caso, así como la que se ha de imponer a los usuarios que conduzcan sin cinturón o sin casco. A su juicio, en estos casos habría que aumentar en, al menos, un punto, la penalización actual, pasando de tres a cuatro. Sin embargo, esta decisión también quedaría en manos del Parlamento.
Para Navarro esta subida es necesaria porque, si "en 12 años y después de las campañas que se han llevado a cabo un conductor no se pone el cinturón o el casco no es porque no lo sabe, porque nadie se lo ha explicado, o no se lo han dicho", ha declarado.
Entre las novedades que propondrá en esta revisión del carné por puntos también propone igualar el periodo en el que un conductor recupera los puntos perdidos, que quiere establecer en dos años. Ahora, este periodo varía según los delitos cometidos. Del mismo modo, propone incentivar los cursos de recuperación de puntos e, incluso, la posibilidad de que un usuario los aumente realizando 'cursos de conducción segura'.
Abrir el debate a la ciudadanía
Pero además de estos cambios, Navarro, ha puesto sobre la mesa los otros tres objetivos que tiene al frente del organismo para reducir el número de muertos en la carretera: abrir el debate en los medios, para que la población "sea consciente de lo que está pasando y de la magnitud del drama"; tomar medidas que incidan en la seguridad vial y en la siniestralidad; y movilizar a la sociedad civil porque 'todos tienen responsabilidad' en este "drama".
Los usuarios vulnerables también están en su agenda. En su intervención ha asegurado que se cerrarán los trabajos de los grupos creados para poner fin a los problemas de las bicicletas y los motoristas. Además, ha señalado que van a "colocar en todas las jefaturas provinciales a un responsable" de estos colectivos, como interlocutor directo con las asociaciones de usuarios. También se incluye en este colectivo a los peatones.
Sobre el "transporte a pie" también ha hablado el responsable de Tráfico en España, para señalar que se pondrá en el centro de las políticas de la DGT, teniendo en cuenta el envejecimiento de la población y que las personas de más de 65 años, sobre todo, caminan.
El reto medioambiental en la movilidad, la cultura de los jóvenes de transporte compartido, y las nuevas tecnologías son otros de los temas que el nuevo director de Tráfico quiere tratar durante su mandato.
Más radares
Los portavoces de PP y Ciudadanos, Óscar Gamazo e Irene Rivera, respectivamente, han criticado al director de la DGT su falta de concreción en las medidas a futuro, unas críticas de las que Navarro se ha defendido recordando que lleva dos meses en el cargo y que de la propuesta a la implementación hay un recorrido de entre "cuatro y seis meses" por la Administración.
Además, ha señalado que no ha visto ninguna medida "en los últimos años con incidencia en la seguridad vial, salvo el subir de 120 a 130 kilómetros hora la velocidad máxima", una iniciativa que tomó el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero, al que él pertenecía.
En relación a la velocidad, Navarro se ha referido a la vigilancia en su cumplimiento y, más concretamente, a los radares. El director de la DGT ha apuntado que en Reino Unido hay 7.200 de estos aparatos funcionando en sus carreteras, en Francia 4.000 y en Holanda 850, mientras que España hay 1.000. "En el comparativo europeo salimos sensiblemente por debajo de la media", ha indicado, para señalar que, por mucho que haya algunos partidos que se oponen al aumento de radares, "es la única forma que hay" de vigilar
Exámenes telemáticos
Por otra parte, tanto el portavoz de Unidos Podemos sobre esta materia, Jorge Luis, como su homólogo de PDeCAT, Antoni Postius, han cuestionado al director de la DGT acerca de una mejora o modernización de los exámenes teóricos de conducir, planteando la posibilidad de que se realicen por Internet. Navarro no se ha mostrado partidario de esta opción.
Según ha explicado, ya se matricula y se hacen cambios de titularidad y bajas de vehículos de forma telemática. Sin embargo, apunta que los exámenes no se pueden hacer así, puesto que son "el núcleo duro del servicio que presta" su departamento. Aún así, ha reconocido que ni la DGT, ni las autoescuelas, ni el ciudadano, está contentos con el sistema actual, que ha calificado de "deficiente".
"España es referencia"
Finalmente, Navarro ha defendido la situación de España en el ranking de mejores países en materia de Seguridad Vial y ha señalado que es "una referencia mundial" en esta materia, sólo por debajo de Suecia, Reino Unido, Holanda y Dinamarca. "El problema es que no lo sabemos o no nos lo creemos", ha señalado para apuntar que a los españoles les "cuesta aceptar y ser conscientes" de que son referencia.
Así, ha explicado que España tiene 39 fallecidos por cada millón de habitantes, cuando la media europea está en 49 y que, aunque haya cuatro países que lo adelantan en relación al número de víctimas en carretera, "estos no tienen entre 75 y 80 millones de turistas" que vienen en coche o lo alquilan, ni un parque de 5,2 millones de motos.
"Si se hiciera una corrección con los turistas y las motos, seríamos la gran referencia mundial", ha insistido, para apuntar que, aún así "no puede haber autocontemplación" cuando el número de muertos por accidentes de tráfico han aumentado de forma progresiva en los últimos cuatros años.