Puigdemont funda el Pacto por el Referéndum para una consulta "acordada" en Cataluña
El presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, ha fundado este viernes el Pacto Nacional por el Referéndum, para promover junto a partidos y entidades sociales partidarias de esta votación una consulta "de forma acordada con el Estado español".
Lo ha dicho en una comparecencia sin preguntas celebrada en el Parlament tras la reunión sobre el referéndum con partidos y entidades, y ha asegurado que el objetivo de este pacto será promover este referéndum en Catalunya, pero también en el resto de España y ante "la comunidad internacional".
Así, el Pacto Nacional por el Referéndum deberá hacer "campaña" en España y en el extranjero para sumar adhesiones a la idea de esta consulta pactada, ya que considera que, una vez el Parlament ha acreditado que quiere este referéndum, hay que explicarlo más allá de Catalunya.
Ha añadido que una de los primeros encargos que tiene este Pacto es elaborar un "manifiesto integrador" a favor del referéndum, y ha confirmado la creación de un Comité Ejecutivo que coordinará los trabajos del pacto y que liderará el exdiputado socialista Joan Igansi Elena.
Este comité estará formado también por los exdiputados de ICV en el Parlament Francesc Pané y Jaume Bosch; la exalcaldesa de Badalona Maite Arqué; la exconcejal en Barcelona Itziar González; la exconsellera de CiU Carme Laura Gil; la exdiputada de ERC Carme Porta, y el director de la revista 'Catalan International View' Francesc de Dalmases.
Así, Puigdemont quiere que con esta iniciativa los partidarios del referéndum que ya hay en Catalunya busquen "un amplísimo apoyo transversal y plural" a que los catalanes decidan qué vínculo quieren que Catalunya tenga con el resto de España.
"Nos hemos conjurado todos para utilizar todo lo que tenemos al alcance para explicar el sentido del referéndum y además nos creemos fieles aquello que aprobado el Parlament" relacionado con la celebración de esta votación, ha concluido.
INCÓGNITAS
Al no aceptar preguntas, no ha aclarado qué pasará si el Gobierno central sigue rechazando este referéndum, aunque él mismo ha defendido en anteriores ocasiones que la votación debe celebrarse con o sin el aval del Estado.
Puigdemont afirmó tras el verano de este año que haría un referéndum sí o sí en septiembre de 2017, pero este viernes no se ha pronunciado sobre si este Pacto Nacional por el Referéndum supone algún tipo de cambio en la vía unilateral que el mismo planteó.
"EVOLUCIÓN" DE OTRO PACTO
El presidente ha explicado que este Pacto Nacional por el Referéndum es una "evolución" del Pacto Nacional por el Derecho a Decidir que fundó el expresidente Artur Mas para impulsar la consulta soberanista que se celebró el 9 de noviembre de 2014.
El Pacto Nacional por el Derecho a Decidir lo lideró el expresidente del Parlament Joan Rigol, que este viernes ha acudido a la reunión en la Cámara catalana y a quien el presidente Puigdemont ha expresado un "profundo agradecimiento".
En el Pacto Nacional por el Derecho a Decidir se sumaron más de 4.000 entidades, que ahora deberán decidir si quiere formar parte del nuevo Pacto, ya que por un tema de protección de datos no se las puede sumar automáticamente, ha explicado Puigdemont.
LA VALORACIÓN DE LOS PARTIDOS
El vicepresidente de la Generalitat, Oriol Junqueras, ha asegurado este viernes que el Govern "no renuncia" a convocar un referéndum unilateral en caso de que finalmente no logre pactarlo con el Estado.
Junqueras, que también preside la comisión interdepartamental del Govern dedicada al impulso del autogobierno de Catalunya, ha defendido que su Ejecutivo trabajará para este pacto, pero ha avisado: "Nunca condicionaremos la democracia al hecho de que nos den permiso para defender el derecho a decidir, porque entonces sería derecho a pedir".
"Tenemos un mandato muy claro y lo cumpliremos", ha respondido al ser preguntado sobre qué le parece que el presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, no haya mencionado el referéndum unilateral en la reunión pese a haberse comprometido a él en caso de no poder pactarlo.
La alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, ha defendido por su parte la celebración de un referéndum pactado, con garantías para ciudadanos y funcionarios y de carácter vinculante, y ha rechazado en este sentido la posibilidad de "repetir un 9N" o poner fechas "a corto plazo" para su convocatoria.
La diputada de la CUP Anna Gabriel ha advertido de que si hay voluntad de celebrar un referéndum "no hay dilaciones que valgan", y se ha mostrado pesimista sobre la posibilidad de que la consulta llegue a sustanciarse tras un acuerdo con el Estado.
En rueda de prensa, Gabriel ha recordado que "el compromiso del Parlament es hacer el referéndum en septiembre del 2017 como fecha máxima".