Parados los trenes AVE en Cataluña durante horas por el robo de cable de fibra óptica
Caos ferroviario. Un robo de cable de fibra óptica en la línea del AVE entre Vilafranca del Penedés y Gelida (Barcelona) ha causado la paralización durante varias horas esta mañana de la línea de alta velocidad Madrid- frontera francesa entre Figueres y Tarragona, que ha afectado a 20 trenes y más de 7.000 pasajeros.
La circulación de trenes de alta velocidad entre Tarragona y Figueres (Girona) ha quedado restablecida a las 10.15 horas una vez solucionada la incidencia, ha informado Renfe.
Los pasajeros podrán ir embarcando en los trenes de forma progresiva hasta el normal funcionamiento del servicio. El Ministerio de Fomento ha precisado que se trata de un robo de fibra óptica y no de cobre, como Renfe y Adif habían informado en un primer momento.
El cable ha sido cortado en el punto kilométrico 570, a la altura de La Granada (Barcelona), lo que ha interrumpido el contacto con el centro de comunicaciones y ha obligado a cortar la circulación.
Un portavoz de Adif ha informado a Efe de que poco después de las siete de la mañana se había detectado en la línea del AVE "una incidencia que afecta a los sistemas de gestión de tráfico" de los trenes y que "por motivos de seguridad los trenes han quedado parados".
El mismo portavoz ha indicado que se habían movilizado a los técnicos de la compañía para resolver esta incidencia cuanto antes.
LA INVESTIGACIÓN DE FOMENTO
Fomento ha abierto una investigación para esclarecer si la rotura de fibra óptica responde a una posible confusión en un intento de robo del cable de cobre o a un sabotaje, según han señalado fuentes del departamento que dirige Ana Pastor.
Es la primera vez que se produce una rotura del cable de fibra óptica, necesario para establecer la comunicación con los trenes.
En un principio, se ha comunicado que esta caída del servicio de trenes de alta velocidad en Cataluña se ha debido a un robo de fibra óptica pero, de hecho, el cable se ha cortado y los supuestos ladrones no se han llevado nada, con lo que fuentes cercanas a la investigación no descartan que se trate de un posible sabotaje.
Renfe ha comunicado el hecho a los Mossos d'Esquadra, al igual que se hace cuando se producen robos y desaparición de cables.
La estación de Sants-Barcelona se encuentra más llena de lo habitual de viajeros desconcertados y buscando información de trenes de alta velocidad, y que son dirigidos a los autobuses para continuar su viaje hacia Madrid.
Se da la circunstancia de que el presidente de Renfe, Pablo Vázquez, se ha encontrado inmerso esta mañana en medio de esta situación, ya que viajaba en un AVE que ha debido parar en Zaragoza, a la espera de que se solucionara la incidencia de Cataluña.