Una cadena de atentados en Turquía deja al menos 9 muertos
Lunes muy tenso en Turquía, país que ha sido escenario de cuatro ataques distintos que han dejado al menos nueve muertos en lo que va de día.
A primera hora de la mañana el Consulado de Estados Unidos en Estambul ha sido asaltado a balazos por un hombre y una mujer, que ya ha sido detenida, según han informado los medios turcos. La emisora CNNTürk, que a su vez cita a la agencia privada de noticias Cihan, ha informado de que la pareja ha mantenido un enfrentamiento con la policía tras tirotear al consulado. Todavía se busca al asaltante, pero en este ataque no hay que lamentar ni muertos ni heridos y se ha producido un día después de que Estados Unidos desplegara seis cazas F-16 en la base aérea turca de Incirlik (en el suroeste del país, cerca de Siria), para la lucha contra el grupo yihadista Estado Islámico (EI).
También en Estambul, poco después de la medianoche, se ha producido un atentado suicida con coche bomba contra una comisaría, en el que han muerto al menos cuatro personas y 10 han resultado heridas. Horas después, las fuerzas de seguridad que protegían a sus compañeros que investigaban la explosión, han respondido al fuego de unos desconocidos y durante el tiroteo han muerto dos atacantes y el jefe del departamento de investigación de la policía de Estambul, Beyazit Ceken. La explosión del coche bomba, escuchada a varios kilómetros de distancia, ha causado también daños en edificios y vehículos circundantes a la comisaría.
Por otro lado, cuatro policías y un soldado turco han muerto en dos ataques del proscrito Partido de los Trabajadores del Kurdistán (PKK), la guerrilla kurda, en la provincia de Sirnak, en el sureste del Turquía. Según ha informado la televisión CNNTurk, cuatro policías han muerto, y otro ha resultado gravemente herido, por la explosión de una mina de control remoto en el vehículo blindado que los transportaba en la localidad de Silopi.
El vehículo policial ha sido atacado cuando entraba en una vecindad bastión del PKK en Silopi, donde el viernes pasado murieron tres civiles y un policía durante un enfrentamiento surgido cuando las fuerzas de seguridad intentaron retirar unas barricadas instaladas en la carretera para impedir su acceso al lugar.
El último ataque se ha producido al ser alcanzado por un misil el helicóptero militar, modelo Skorsky, en la misma provincia Un soldado ha muerto y otro ha resultado herido en este atentado.
SITUACIÓN TENSA
Estos ataques no han sido algo aislado. El pasado sábado se registraron tres ataques del PKK en el sureste de Turquía y, seegún la agencia semioficial Anadolu, un total de 26 miembros de las fuerzas de seguridad han muerto solo en el mes de julio en ataques del PKK, al tiempo que 390 rebeldes de esa guerrilla han sido asesinados por el ejército turco, principalmente durante bombardeos aéreos en el norte de Irak.
Recientemente, el grupo yihadista Estado Islámico (EI), al que combaten los kurdos de Siria e Iraq, había advertido a Turquía de que podría convertirse en objetivo de sus ataques con coche bomba si no se mantiene al margen de la guerra en su contra.