Mujeres para el cambio
Cuatro mujeres simbolizan esta mañana en la prensa la cara y la cruz de unas elecciones que dejan una palabra que no oíamos desde los años 90: cambio...
Manuel Carmena levanta su brazo para agradecer el resultado a sus simpatizantes madrileños. Ada Colau, visiblemente satisfecha, abre sus brazos como si quisiera fundirse con un público que clama su triunfo en Barcelona. Cristina Cifuentes, sonriente, y Esperanza Aguirre, perpleja, dividen en dos la primera de ABC, que sentencia: "El PP gana por votos, pierde en poder". En concreto, se deja 2,5 millones de votos y cede el poder territorial a la izquierda.
Sigue leyendo después de la imagen.
Se trata de un "cambio profundo", como analiza El País en un largo editorial en el que saca varias conclusiones: la primera, que el voto conservador sigue siendo el más fuerte en las autonomías pero "el desplome en votos del PP... es síntoma del cambio profundo que se está produciendo en este país y que el partido del Gobierno no ha sido capaz de detectar".
El PSOE, con unos resultados satisfactorios, se ve "obligado a seguir trabajando en la vía de la renovación" y "las nuevas izquierdas abren una gran brecha en las dos ciudades más emblemáticas". "En definitiva, se abre un tiempo en el que será preciso tener en cuenta muchas opiniones y escuchar a más sectores". Los partidos están "condenados a pactar", sintetiza Cinco Días, que recuerda que "todas las comunidades y grandes ayuntamientos dependen de acuerdos".
La prensa regional y local constata también esa fragmentación de parlamentos y consistorios en los antiguos feudos populares...
Las Provincias de Valencia titula: "Giro radical a la izquierda. Rita Barberá dice adiós a 24 años de alcaldesa". El Heraldo de Aragón constata: "La caída del PP abre las puertas a un gobierno de izquierdas". Diario de Navarra, "UPN pierde el gobierno".
Tan sólo El Correo, en Euskadi, titula en positivo con el éxito del PNV, que le permite asegurar en su editorial que el partido se mantiene incólume porque gana en las juntas generales de Vizcaya, Álava y Guipúzcoa, donde la debacle corresponde a Bildu.
En Cataluña, El Periódico proclama que "Colau da el vuelco" y La Vanguardia, en un editorial, considera que el resultado en el Ayuntamiento de Barcelona "abre un gran interrogante sobre el proceso para la independencia" porque, como reconoció el propio Artur Mas, "si Barcelona nos da la espalda, no podremos salir victoriosos porque es nuestra capital".
Sigue leyendo después de la imagen.
Un pesimismo que contrasta con el análisis que Xavier Vidal-Folch hace en El País, para quien el resultado de ayer devuelve la existencia a las autonomías y apunta, una vez más, al federalismo como solución.
Pese al carácter local de las elecciones de ayer, los analistas no se resisten a sacar sus conclusiones a nivel nacional mirando al Gobierno de Rajoy...
"Lo peor para el PP está por llegar", vaticina José Antonio Zarzalejos en La Vanguardia, mientras que Lucía Méndez, en El Mundo, estima inevitable que se abra el debate sobre la renovación del liderazgo, "aunque está por ver quién será el primero en abrir la boca.
La única que estaba en disposición de pedir la convocatoria de un Congreso del PP -que ya toca- era Esperanza Aguirre, y ella misma ha sido acallada por el electorado madrileño". Además, "varios presidentes autonómicos y decenas de alcaldes del PP perderán su cargo porque "ni siquiera podrán sumar con Ciudadanos".
El único que no pierde la moral es Bieito Rubido en ABC, que estima que "Rajoy tiene siete meses para convencer (a los electores) de que no deben hacer algo de lo que más tarde se arrepientan".
Y ¿cómo ve la prensa internacional la jornada de ayer?...
"Seísmo político en España", asegura el diario Le Monde, que constata: "La irrupción del partido radical de izquierda Podemos obliga a los dos partidos históricos a alcanzar acuerdos para gobernar". El conservador The Times de Londres habla de "los insurgentes de izquierdas desharían el viejo orden".
Desde Alemania, Die Welt considera que "Podemos da la sorpresa en las elecciones locales, aunque no hay claros ganadores". Y The Wall Street Journal considera que "los españoles castigan al gobernante PP lanzando un apoyo significativo a dos partidos advenedizos".
El tuit de esta mañana también habla de las elecciones de ayer pero desde otra perspectiva, desde el interior de una campaña desgarradora...
Es la columna de la última página de El País que cada lunes firma Almudena Grandes: habla del fuego amigo que en algunas formaciones ha sido peor que los navajazos que se preveían entre rivales... Su conclusión: "Las malas personas no deberían dedicarse a hacer política".
