La presidenta del Observatorio contra la Violencia de Género quiere eliminar los piropos
La presidenta del Observatorio contra la Violencia de Género del Consejero General del Poder Judicial (CGPJ), Ángeles Carmona, quiere eliminar el "piropo" porque "supone una invasión a la intimidad de la mujer", aunque sea halagador.
"El piropo ha sido siempre permitido y se ha asumido como algo normal, pero lo cierto y verdad es que supone una invasión en la intimidad de la propia mujer porque nadie tiene derecho a hacer un comentario sobre el aspecto físico de la mujer", ha indicado Carmona en una entrevista en RNE recogida por Europa Press.
La presidenta del Observatorio ha recordado que en ciudades como El Cairo las mujeres van con auriculares y tapones "para no escuchar los comentarios de este tipo y, aunque sean bonitos, buenos y agradables y sean actitudes absolutamente permitidas en nuestra sociedad, deben ser erradicadas y debe haber mucho más respeto por la imagen de la mujer".
Por otra parte, Carmona se ha referido al porcentaje de denuncias falsas que llegan a los juzgados por violencia machista y ha recordado que en este tipo de delito solo suponen un 0,10% de las condenas. "Es un porcentaje tan mínimo que realmente es muy inferior al de falsos testimonios de cualquier otro delito", ha explicado.
Carmona ha aprovechado el décimo aniversario de la Ley Integral contra la Violencia de Género para destacar los "beneficios importantísimos" que supuso su aprobación para la luchar contra el maltrato. "Fue una ley revolucionaria porque aborda una vulneración de los derechos humanos desde el punto de vista integral y de la prevención, y esta visualización ha sido algo muy novedosa e imitada en países en nuestro entorno", ha explicado.
Como aspecto a mejorar, la presidenta del Observatorio ha incidido en la importancia de contemplar a los menores como víctimas porque "han sido los grandes olvidados" y ha recordado que, si se implementan las medidas propuestas para proteger a los niños, "ningún padre maltratador con condena firme tendrá acceso a visitar a sus hijos hasta que no se acredite que el menor no va a tener secuelas psicológicas".
En su opinión, "un maltratador no puede ser nunca un buen padre ni ejercer su derecho de visitas con normalidad porque las organizaciones internacionales nos han dicho que un menor, solo siendo testigo, puede sufrir secuelas psicológicas". La manipulación de los dispositivos electrónicos por parte de los maltratadores será considerada como quebrantamiento de condena, según establece la reforma de la ley orgánica de reforma del código penal que se está tramitando.
La reforma contempla también la introducción de tipos penales para cubrir "cierta laguna legal", como el de hostigamiento y acoso, que consiste en "esa conducta reiterativa de seguimiento, muchas llamadas y muchos mensajes, sin que haya insultos ni amenazas, pero que puede crear secuelas psicológicas y atemorizantes muy graves en la mujer".
Carmona ha reconocido que el procedimiento judicial es "muy difícil, arduo y complicado" para la mujer y ha asegurado que por ello desde el Observatorio se están implementando medidas "para que se sienta siempre apoyada".
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