Detenido por matar a su hijo de 19 meses y herir a otro de cinco años
La Policía ha detenido este lunes a un hombre sospechoso de matar a uno de sus hijos, de 19 meses de edad, y herir a otro, de cinco años, en el barrio madrileño de Carabanchel, según han informado a Europa Press fuentes de la Jefatura Superior de Policía de Madrid. El hombre asegura que discutió con la madre de los pequeños y que cometió el crimen por el bien de los niños.
El detenido, identificado como Jorge Diego C.A., nacido en la ciudad uruguaya de Montevideo y con residencia legal en España, habría apuñalado a sus hijos en su vivienda, ubicada en el número 12 de la calle Pedro Martínez.
Fuentes policiales han dicho a Efe que el detenido le pidió a su exmujer Verónica C., de nacionalidad ecuatoriana y con la que no convivía desde hacía dos meses, quedarse con los niños.
En torno a las doce de la noche, Jorge Diego llamó por teléfono a la madre de los niños y ésta se percató de que el hombre estaba borracho, por lo que decidió ir al domicilio de él acompañada de su hermana y una amiga. Cuando llegaron a la casa, el bebé ya había fallecido, en tanto que su hermano tenía un cuchillo clavado en la espalda.
Al lugar se han desplazado efectivos policiales y de los servicios médicos tras un aviso al 091 y al 112 realizado alrededor de las 00.30 horas por un particular que ha sido alertado del suceso por la madre.
Una vez llegados al lugar del suceso, el SUMMA ha comprobado que el bebé de 19 meses había fallecido por heridas de arma blanca en el cuello y que el menor de cinco años presentaba una herida penetrante de arma blanca en la espalda, tal y como han informado fuentes de Emergencias Madrid.
Tras estabilizarle, el herido ha sido trasladado al Hospital 12 de Octubre, donde ha ingresado en estado grave, aunque no se teme por su vida. Por su parte, el Samur-Protección Civil ha ingresado en el mismo hospital a la madre, a la tía y a la abuela de los niños, que presentaban crisis de ansiedad.
Fuentes del hospital han informado a Efe de que la tía de los pequeños continúa ingresada en observación, en tanto que la madre y la abuela han podido irse a su casa tras ser atendidas en el mismo centro hospitalario.
UNA NOTA DE SUICIDIO
El presunto agresor tenía pensado suicidarse y ha dejado una nota de despedida en la que decía que no quería ser una carga para nadie.
Esa es la hipótesis que baraja la Policía, según han subrayado a Efe fuentes de la investigación, que han señalado que el hombre, ya detenido, había escrito una carta en la que daba a entender que se suicidaría, aunque después cambió de opinión.
De hecho, en la carta decía que no quería ser una carga para nadie y que dejaba a sus hijos y a su expareja, con la que ya no convivía desde hace mes y medio, libres.
Las mismas fuentes han señalado también que, según se desprende de las declaraciones de los allegados, el hombre maltrataba a la madre de sus hijos, aunque ésta nunca presentó denuncia.
La pareja que vive más cerca del hombre ha asegurado que discutía a menudo con su exmujer, aunque nunca imaginó un desenlace así, y ha recordado que uno de los niños lloraba mucho por las noches. Tanto ellos como otra vecina del primero, Yolanda Enache, han señalado que no les conocían bien porque eran "muy cerrados" y no tenían mucha relación con ellos.