Rajoy pide en la ONU poner fin al "anacronismo" de Gibraltar y culpa al Reino Unido del conflicto
El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, ha aprovechado su intervención ante la Asamblea de la ONU en la tarde de este miércoles (madrugada del jueves en España) para reclamar el fin del "anacronismo" que supone Gibraltar y para acusar al Reino Unido de no atender las peticiones de la ONU para entablar un diálogo con España sobre la soberanía del peñón.
La reivindicación de Gibraltar ha sido uno de los mensajes de Rajoy al inicio de la 68 Asamblea General de la ONU, ante la que ha considerado que España ha demostrado con hechos que es legítima su aspiración de acceder al Consejo de Seguridad de Naciones Unidas en el periodo 2015-2016.
El presidente del Gobierno ya había avanzado que iba a exponer la situación de Gibraltar en su segunda intervención en Naciones Unidas, y lo ha hecho aludiendo a la "consolidada" doctrina legal de la ONU sobre descolonización.
En ese contexto, ha recordado que Gibraltar es una colonia a la que la ONU incluyó en 1963 en la lista de territorios no autónomos pendientes de descolonización.
"Es el único pendiente en Europa, afectando aún a nuestra integridad territorial", ha recordado antes de lamentar que, desde entonces, el Reino Unido venga desoyendo el mandato de la Asamblea de Naciones Unidas y el compromiso contraído con España en la Declaración de Bruselas de 1984, en la que ambos países se comprometieron a dialogar de forma bilateral sobre la soberanía de Gibraltar.
Por ello, ha reiterado su llamamiento al Reino Unido para retomar el diálogo bilateral y la cooperación regional.
El discurso de Rajoy ha estado plagado de referencias a los que considera "demostrados" compromisos de España con la ONU, entre ellos su total apuesta por el mantenimiento de la paz y la seguridad internacionales, la resolución pacífica de los conflictos, la cooperación internacional para el desarrollo, y la promoción y el respeto de los derechos humanos.
SILLA EN EL CONSEJO DE SEGURIDAD
Será en octubre del próximo año cuando se decidirá que países se incorporan al Consejo de Seguridad para los años 2015 y 2016 como miembros no permanentes, y España, Turquía y Nueva Zelanda optan a dos de esos puestos.
Rajoy ha subrayado que el compromiso de España con la ONU no es mera retórica, ya que es el sexto contribuyente a su presupuesto, y que 130.000 soldados españoles han participado en operaciones de mantenimiento de la paz y misiones de ayuda humanitaria en todas las regiones del mundo desde 1989.
Ha recordado igualmente que España creó en 2008 el Fondo de Cooperación para el Agua y el Saneamiento, dotado con mil millones de dólares destinados a proyectos en América Latina, y que va a lanzar junto con Argelia la Estrategia del Agua en el Mediterráneo Occidental.
A ello se une que España ha impulsado desde 2007 junto con el Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) un fondo para lograr la consecución de los Objetivos del Milenio de la ONU.
Precisamente, antes de su intervención en la Asamblea, Rajoy ha presidido un acto en Naciones Unidas en el que se han presentado los resultados de ese fondo, que, según ha explicado, ha contado con mil millones de dólares que han beneficiado a 20 millones de personas mediante 130 programas en 50 países.
En ese acto, la aportación española ha recibido el agradecimiento explícito de a ONU en boca de la administradora del PNUD, Helen Clark, y, poco después, el cofundador de Microsot Bill Gates ha hecho pública una declaración de apoyo a la actitud de España en materia de cooperación.
SIRIA
Además, Rajoy se ha referido en su intervención ante la Asamblea de la ONU a la situación en Siria para apelar al diálogo político y considerar que el ataque con gas sarín acreditado por Naciones Unidas "ni puede repetirse ni puede quedar impune".
Aprovechando su coincidencia con otros líderes internacionales, en Nueva York, Rajoy ha mantenido una serie de reuniones bilaterales, entre ellas una con el presidente de Irán, Hassan Rohaní.
En ella, según fuentes del Gobierno español, Rajoy le ha animado a dar pasos para tranquilizar a la comunidad internacional sobre el uso pacífico del programa nuclear iraní.