Moncloa asegura que Bárcenas quiere desviar la atención y que no logró nada de Rajoy
El Gobierno considera que la divulgación de los SMS entre Mariano Rajoy y Luis Bárcenas responde a una estrategia del extesorero del PP para desviar la atención de sus problemas con la Justicia y demuestran que no consiguió nada de lo que pedía al presidente del Gobierno.
Fuentes del Ejecutivo consultadas por Efe han interpretado de esta forma la publicación en el diario El Mundo de una serie de mensajes con diálogo de Bárcenas o su esposa, Rosalía Iglesias, con Rajoy en diferentes fechas de los últimos años, el último de ellos en marzo de 2013. Rajoy aseguró en enero que no recordaba cuándo había hablado con Bárcenas por última vez.
Las fuentes subrayan que divulgar ahora esos mensajes hace patente la existencia de una clara estrategia para que, ante sus problemas con la Justicia y las explicaciones que tiene que dar sobre los 48 millones de euros que tenía en Suiza, se hable de otros asuntos.
En esa línea, el Gobierno expresa su sorpresa por el hecho de que Bárcenas haya guardado mensajes de texto de ese tipo durante varios años, lo que cree que certifica que había una estrategia predefinida para usarlos ante sus problemas judiciales.
"NO HA CONSEGUIDO NADA"
En declaraciones a Europa Press, el Ejecutivo destaca que Luis Bárcenas ha estado presionando no sólo a Mariano Rajoy, sino a otros muchos miembros del PP, a los que también envió mensajes con un doble objetivo: tratar de evitar la acción de la justicia y proteger la fortuna que escondía en Suiza, estimada por los tribunales españoles en más de 48 millones de euros.
Asimismo, subrayan que el hecho de que el extesorero del PP esté en prisión es una clara demostración de que no ha tenido ningún tipo de protección por parte del Gobierno.
Rajoy podrá expresar este lunes en público su opinión ante estos mensajes en la rueda de prensa que ofrecerá en el Palacio de la Moncloa junto al primer ministro polaco, Donald Tusk, al término de la IX cumbre bilateral.
Será en la ronda de preguntas cuando los periodistas podrán pedir al jefe del Gobierno su opinión sobre esos mensajes y sobre otras acusaciones de Bárcenas en torno al supuesto cobro de sobresueldos ilegales o una financiación ilegal del PP.
La última vez que Rajoy habló públicamente sobre el caso Bárcenas fue el pasado 3 de julio, en Berlín, cuando dijo que no quería hacer comentarios sobre este asunto o sobre otros, como el caso de los ERE en Andalucía, para no condicionar las decisiones judiciales.