Una estadounidense que ha vivido en España revela el drama que supone comprar el pan en su país
Ni punto de comparación con lo que pasa en Europa.
Ir al comprar el pan es una acción cotidiana para millones de personas en España que suelen acudir a su panadería de confianza en el barrio para adquirir este producto tan demandado y tan consumido.
Una tiktoker norteamericana que vivió en España durante cuatro años ha dejado a muchos de piedra al explicar "cómo arruinaron el pan en Estados Unidos". Primero se ha grabado comprando pan en España y explicando que eso no lo puede hacer en su país.
Ha contado que en España hay unas 15.000 panaderías y que en Estados Unidos, siendo un país de más de 300 millones de habitantes, sólo hay 10.000. Lo curioso es que los norteamericanos, para su desgracia, suelen comprar el pan en los supermercados, ya que no hay casi panaderías.
"Aquí el pan del super no está ni en el mismo universo que el pan de panadería o el pan del super en España. ¿Voy a llorar? Pues igual sí, la verdad", ha añadido desde un coche, la única forma de desplazarse allí.
Dentro del super ha mostrado que todo el pan está envasado: "Después de vivir cuatro años en España me da muchísima pena que esto sea lo que tenemos. También me da rabia porque sé que existe un pan muchísimo mejor, más sencillo, más saludable y que no tiene ingredientes ilegales".
Para "engañar" a la gente allí, algunas bolsas de pan de supermercado tienen efecto humo para simular que el pan está recién horneado o le ponen harina encima para hacerlo pasar por natural, luego se ven los ingredientes y ya se ve cuál es realmente la calidad de ese pan.
Para acabar ha explicado qué ha pasado para que el pan en su país sea de tan mala calidad y ha señalado que siempre triunfa el método más sencillo para elaborar algo y el que más dinero dé.
Ha lamentado que el pan de su país sea tan malo y ha contado que es una buena muestra de cómo funciona su país, donde no se venden productos tan tan nocivos para la salud. Productos y formas de hacer las cosas que han llevado a Estados Unidos a ser un país con problemas de obesidad.