El Niño se va y la desolación se instala con La Niña en los próximos meses
Malas noticias para España.
El Niño y La Niña son dos eventos climáticos que se producen por variaciones en la temperatura en parte del océano Pacífico. Cada uno de ellos causa alteraciones significativas en la atmósfera que se traducen en fenómenos meteorológicos que afectan a todo el planeta.
Durante los últimos meses ha estado presente El Niño, que ocasiona un incremento generalizado de las temperaturas a nivel global y un aumento de las precipitaciones en algunas zonas del Cuerno de África, Asia Central y, especialmente, América del Sur y sur de EEUU.
El fenómeno de El Niño suele repetirse en periodos de entre 2 y 7 años y su duración habitual va desde los 9 hasta los 12 meses. Después de que el evento climático haya estado presente durante gran parte de 2023, se va acercando el momento de decirle adiós. De hecho, las aguas del Pacífico ecuatorial ya se están enfriando.
Sin embargo, existen informes que ya apuntan a que lo que viviremos tras la marcha definitiva de El Niño no será un periodo de neutralidad sino un nuevo evento climático: La Niña.
De confirmarse, La Niña sería una mala noticia para la actual situación de sequía en España. El motivo es que el fenómeno, más allá de estar asociado a una bajada generalizada de las temperaturas a nivel global, suele disminuir la cantidad de precipitaciones en nuestro país.
La Niña llegaría en verano y, según recoge Xataka, tendría dos consecuencias fundamentales desde el punto de vista hidrológico: un otoño veraniego (con menos lluvias de lo habitual para esa estación del año) y un invierno seco (a excepción del Mediterráneo, donde pueden producirse DANAs).
En cualquier caso, aún habrá que esperar para saber con certeza si ese escenario se cumple. La situación en España a corto plazo continuará estando dominada por circunstancias que dan lugar a pocas precipitaciones: grandes bloqueos anticiclónicos y una cantidad limitada de borrascas profundas alcanzando la Península.