Una de las sesiones de abusos sexuales a Gisèle Pelicot duró seis horas, con un solo hombre

Una de las sesiones de abusos sexuales a Gisèle Pelicot duró seis horas, con un solo hombre

Vuelve a ausentarse del juicio, por cuestiones médicas, el acusado de haber drogado a su mujer para que otros la violaran. 

Gisèle Pelicot, acompañada de sus abogados Antoine Camus y Stéphane Babonneau, a su llegada al Tribunal de Justicia de Aviñón, este miércoles.Edgar Sapiña / EFE

Una de las sesiones de abusos sexuales a la que fue sometida Gisèle Pelicot bajo ansiolíticos duró al menos seis horas con un solo hombre, según las conclusiones de uno de los expertos que ha declarado en el juicio que se celebra en Aviñón, en el sureste de Francia.

El perito Olivier Eymard, que examinó el material informático incautado a Dominique Pelicot, el marido de Gisèle, explicó ante el Tribunal de lo Criminal de Vaucluse que esa duración la estimó a partir del análisis de cinco vídeos sucesivos en los que aparecía un mismo hombre.

Lo hizo a preguntas de los abogados de la víctima que querían conocer las fechas exactas en que se habían hecho los vídeos y las fotografías que se le requisaron a Dominique Pelicot en 2020 y que son la principal base de la acusación.

Eymard quiso dejar "claro que la fecha de última modificación (de cada vídeo) corresponde a la realización" y eso permite determinar la duración de las sesiones, en respuesta a la polémica que se había generado porque algunos abogados cuestionaban que fueran tan largas como decía la acusación particular.

Uno de los acusados se levantó para increpar al perito cuando justificaba las razones de sus conclusiones sobre esa duración, pero un abogado le conminó a sentarse.

Según las conclusiones del sumario, Dominique Pelicot estuvo drogando a su mujer con ansiolíticos entre 2011 y 2020, lo que se supo después de ser detenido por grabar bajo las faldas a mujeres en un supermercado de la ciudad de Carpentras.

Esas grabaciones las guardaba en un disco duro con decenas de hombres a los que había contactado en línea, en buena parte a través de una plataforma de contactos que fue cerrada posteriormente.

Enfermo y sin declarar

Dominique Pelicot fue hospitalizado ayer martes por un problema de salud, que según su abogada había comenzado ya el pasado viernes y que puede tener su origen en el sistema urinario. Ayer también se ausentó desde poco después del comienzo de la audiencia por la misma razón. 

El presidente del tribunal, Roger Arata, había solicitado un informe médico para conocer exactamente su estado, por si había que suspender el proceso, en un juicio que comenzó el día 2 y debería finalizar una o dos semanas antes de Navidad. 

Aunque hoy se esperaba que regresara, no ha sido así, finalmente. Queda en el aire el momento en que se programará su declaración y el futuro del proceso. Arata le ha dejado volver a la prisión y ha pedido que se le someta a un peritaje médico para que el tribunal pueda conocer exactamente su estado de salud y determinar si se podría programar el jueves por la tarde su declaración. Béatrice Zavarrom su abogada, ha insistido en los últimos días en que no hay ninguna maniobra de Pelicot para evitar su declaración, sino todo lo contrario, y que está "impaciente" de poder hablar ante la que fue su mujer, Gisèle, y ante sus hijos, que acuden a este proceso.

Gisèle Pelicot ha entrado esta mañana en la sala de audiencias sin las gafas de sol que llevaba en los días anteriores. Su exmarido (el divorcio se formalizó el mes pasado) se sienta en el banquillo junto otros 50 hombres que fueron identificados en los archivos de fotos y vídeos que él guardaba por haber tenido relaciones entre 2011 y 2020 con Gisèle Pelicot cuando ella estaba en estado inconsciente, drogada con ansiolíticos.