Ordenan el ingreso en prisión de tres proxenetas de la red de empresarios pederastas

Ordenan el ingreso en prisión de tres proxenetas de la red de empresarios pederastas

Se trata de dos 'mamis' y un 'taxista'.

Los hombres juzgados por abusar de menores.EFE/Marcial Guillén

La Sección 3 de la Audiencia Provincial de Murcia ha acordado este martes el ingreso inmediato en prisión de las proxenetas Ruth D.T. y Nelly C.P., así como del 'taxista' Walter D.M. al considerarlos máximos responsables de una red de prostitución de menores.

Los responsables de la organización reconocieron haber buscado 11 chicas a sabiendas de su minoría de edad para prostituirlas con hombres, algunos de avanzada edad y de buena situación económica. "Estaban ejecutando una de las formas más graves de violencia contra las mujeres que se pueden acometer", argumenta el auto judicial.

Aunque la suma aritmética de las penas impuestas ascendía a 16 años de prisión en el caso de R.D.T. (por ocho delitos de prostitución de menores en su modalidad agravada) y de 12 años en el caso de N.C.P. y W.D.M. (por seis delitos), la Sala aplica previamente el límite del artículo 76 del Código Penal, que establece que el máximo de cumplimiento no podrá exceder del triple del tiempo por el que se le imponga la más grave (en estos casos el triple de dos años) y declara extinguidas el resto de las penas de prisión impuestas.

Límite que no afecta a las penas de multa (4.300, 3.240 y 4.320 euros, respectivamente) y la medida de libertad vigilada por un tiempo total de cinco años, que los tres deberán cumplir íntegramente, además del pago de las indemnizaciones a las víctimas que ascienden a un total de 17.000 euros (que N.C.P. y W.D.M. ya han satisfecho, quedando pendiente la mayor parte de los 8.000 euros que R.D.T. está obligada a pagar).

Los siete empresarios fueron condenados por prostitución de menores tras el acuerdo alcanzado entre la fiscal y los acusados a penas de prisión de 5, 10 y 15 meses, si bien todos ellos se encuentran en libertad al ser suspendida la pena, condicionada a que no vuelvan a delinquir.