Los cazadores vuelcan 25.000 kilos de sandías y melones para los animales salvajes
Tiene una clara explicación.
La sequía y las sucesivas olas de calor que están asolando a España este año se traducen en problemas más allá del sector agroalimentario. También en el ámbito de la caza han tenido que tomar medidas ante esta agravada situación. Según se ha hecho eco la web Club de Caza, en Ciudad Real ha tenido lugar una llamativa iniciativa por parte del propietario de una empresa cinegética.
En este sentido, se trata de la medida tomada por la firma Monterías y recechos JC y AM, en una finca ciudadrrealeña, donde se vuelca la friolera de 25.000 kilos de sandías y melones. Calma, los vídeos aportados en los que se ve caer el torrente de fruta en un sendero tienen una clara explicación.
Se trata de una iniciativa que tiene como finalidad ayudar a saciar la sed de los animales, al igual que dicha empresa acerca a la finca también cantidades que se moverán entre los 42.000 kilos de pienso y 45.000 de grano para la alimentación de los animales salvajes. Se trata de las entregas que hacen cada tres días para la fauna de las 14 fincas a su cargo. Cada entrega la constituyen siete sacos de maíz, siete de pienso y decenas de alpacas de alfalfa.
¿Por qué sandías y melones cuando están tan caras?
La razón de que hayan optado por dos frutas que en los últimos meses han experimentado vaivenes significativos en sus precios está clara. Se trata de ejemplares que han sido seleccionados y catalogados como no aptos para el consumo humano. Están dirigidos solo al consumo de animales y la elección es más que apropiada.
En un momento de escasez de agua, esta medida se emplea porque el 90% de esta fruta es agua, lo que constituye una fuente de agua y refresco muy completa.
