Abatido un hombre en Figueres cuando disparaba con una escopeta contra la casa de su excuñada
La víctima, un hombre de 50 años, también abrió fuego contra los agentes de la Guardia Urbana que acudieron al lugar y que lo alcanzaron en 5 partes del cuerpo.
La Guardia Urbana de Figueres, Girona, ha matado a tiros esta noche a un hombre de unos 50 años, vecino de la ciudad, que se había presentado en casa de su excuñada y, tras iniciar una discusión de la que por el momento se desconoce el motivo, empezó a pegar tiros contra la fachada de la vivienda.
Los familiares atacados corrieron a refugiarse en el interior de la casa. Una vez dentro llamaron pidiendo ayuda a su vecina, que es agente de la Guardia Urbana y quien se ha encargado de alertar a sus compañeros mientras aconsejaba a las víctimas del ataque que cerraran todas las persianas y abrieran la luz del exterior de la finca.
Cuando llegó la primera patrulla pidió al sospechoso que dejara la escopeta, pero este no sólo no les hizo caso, sino que además abrió fuego contra los agentes. Los dos primeros en llegar al lugar de los hechos, tras pedir apoyo a otras patrullas, devolvieron los disparos al agresor y le alcanzaron en cinco partes del cuerpo: tres tiros en las piernas, otro en el abdomen, en el pecho y en una mano.
Una vez en el suelo le retiraron el arma y detuvieron. Una ambulancia del Sistema de Emergencias Médicas (SEM) que se había desplazado hasta el lugar le trasladó hasta el Hospital de Figueres. El hombre llegó sobre las 21:30 horas en parada cardiorrespiratoria a Urgencias donde los médicos consiguieron reanimarle, pero finalmente sobre las 22:45 horas falleció debido a la gravedad de las numerosas heridas que presentaba.
Ahora, los Mossos d’Esquadra abrirán una investigación para saber qué ha motivado la actuación del agresor y si la actuación de los agentes de la Guardia Urbana ha sido la correcta. Esta misma noche se han empezado a visualizar imágenes de lo sucedido gracias a las cámaras de seguridad de que dispone el domicilio tiroteado.
Este es el tercer tiroteo en las comarcas de Girona en 11 días. El pasado día 8 un hombre de 66 años disparó contra agentes de los Mossos que acudieron a una alerta dada por sus familiares en la Bisbal d’Empordà. El pasado día 12, también en Figueres, agentes de la Policía Nacional dispararon a uno de los dos fugitivos franceses de origen magrebí que perseguían por estar reclamados por la justicia, pertenecían a un clan relacionado con el tráfico de drogas y habrían matado a un miembro de otro clan.