La farmacia más antigua de España y tal vez de Europa no se encuentra en España y aun se puede visitar

La farmacia más antigua de España y tal vez de Europa no se encuentra en España y aun se puede visitar

Un auténtico testimonio de la tradición farmacéutica española.

El símbolo de una farmacia, en la calle.Getty Images

Las farmacias han desempeñado un papel fundamental en la salud pública a lo largo de la historia, siendo puntos clave para el acceso a medicamentos y el conocimiento médico. Muchas de ellas, con siglos de antigüedad, no solo han contribuido a la evolución de la ciencia, sino que también se han convertido en guardianas del patrimonio histórico. En esta línea, ¿alguna vez te has preguntado de qué año data la farmacia más antigua de España?

Para responder esta cuestión tenemos que hablar primero de la farmacia Esteve, un establecimiento que lleva siglos de gestión y cuya regencia ha pasado por hasta siete generaciones. Esta farmacia está documentada desde 1594, aunque se dice que abrió sus puertas un siglo antes en la localidad gerundense de Llívia. Con dicho origen esta no solo se convierte en la farmacia más antigua de España, sino también la de más solera de Europa.

Según la página de la Generalitat dedicada al Patrimonio Histórico, la farmacia Esteve ya existía en 1415, por lo que su antigüedad podría ser incluso mayor. Uno de sus primeros propietarios fue Jaume Esteve, cuya familia regentó el negocio hasta que en 1942 León Antonio Esteve cedió el establecimiento al ayuntamiento. De esta forma, este local no solo es testimonio de la tradición farmacéutica española, sino también un símbolo de resistencia cultural.

Rodeada por territorio francés

Aunque políticamente hablando el municipio de Llívia pertenece a España, lo cierto es que está completamente rodeado por tierras francesas debido al Tratado de los Pirineos de 1659. Según este acuerdo, todos los municipios que componían la comarca de La Cerdanya quedarían integrados en Francia, pero para entonces Llívia era considerada una villa, no un municipio, por lo que se mantuvo en Cataluña y en España.

Así, esta farmacia se encuentra a unas dos horas en coche desde Barcelona, aunque para llegar hasta ella debemos pasar la frontera con Francia. Ubicado en la calle Font, 10, este establecimiento se puede visitar cualquier día de semana por poco más de tres euros, un precio más que asequible para admirar la que es la farmacia más antigua de España y, posiblemente, de toda Europa.

Esconde auténticas maravillas

La farmacia Esteve ha logrado sobrevivir a lo largo de los siglos en este curioso escenario geográfico y político. En todos sus años en activo ha abastecido a los habitantes de la zona y a numerosos viajeros, manteniendo viva la tradición farmacéutica en una región de cruce de caminos y culturas. Hoy en día, este local no solo es un atractivo turístico por su historia, sino también por albergar un museo que expone antiguos utensilios farmacéuticos.

En su interior todavía conserva el mostrador, una biblioteca, diversos recetarios, instrumentos de laboratorio, varias drogas antiguas y mucho material de cuando abrió por primera vez. Aunque su tesoro mejor guardado sin duda es una colección de tarros de vidrio y destiladoras, junto a una colección de cajas renacentistas y un armario barroco de belleza admirable. Unos objetos que ofrecen una visión fascinante de cómo se ejercía la medicina en aquella época, brindando una conexión tangible con el pasado.