El toro incendiario termina con dos casas quemadas y una indemnización de 63.000€
El ayuntamiento cometió una imprudencia al no disponer de suficientes medidas de seguridad.
Las fiestas del toro de fuego en Arenas de San Pedro acabó con dos casas incendiadas en 2017, cuenta la OCU en la edición de noviembre de 2023, de su revista Dinero y Derechos. El techo de las dos viviendas se prendieron al caer en ellas material pirotécnico.
Los dueños de las viviendas reclamaron al ayuntamiento, y fue condenado por el Tribunal Superior de Justicia de Castilla y León a pagar por daños cerca de 63.000 euros. El ayuntamiento intentó defenderse alegando que no se sabía si el material causante provenía de los asistentes o del consistorio.
El tribunal consideró probado, en marzo de 2021, "la falta de medidas de seguridad suficientes para evitar los riesgos de un espectáculo de este tipo" por parte del ayuntamiento. Por lo tanto, la responsabilidad recayó sobre el consistorio.
Es diferente en caso de que alguien "se ponga en peligro conduciendo a toda mecha o corriendo un encierro, se entiende que asume el riesgo y es muy difícil que, si se daña la administración, se haga responsable".
La administración se tiene que cuidar mucho de los riesgos que conllevan los festejos populares, ya que suele haber aglomeraciones de gente, estructuras efímeras, uso de pólvora y fuegos artificiales.
Al igual que en las fiestas en las que hay encierros porque no es lo mismo estar contemplando el evento desde la barrera y sufrir una cogida por un fallo de seguridad que ser arrollado por correr delante del toro. Cuando una persona asume el riesgo de forma activa y voluntaria, es más difícil que le exija responsabilidad a la administración, según la OCU.