El Supremo confirma el despido de una empleada de Carrefour por apropiarse de cupones de clientes
La trabajadora presentó un recurso contra la sentencia del TSJEx que calificó su despido como procedente tras haber quedado probado que usó de forma fraudulenta el programa de fidelización de puntos de clientes para beneficiarse.
El Tribunal Supremo ha confirmado el despido de una empleada de Carrefour por apropiarse de cupones de clientes tras el recurso presentado por la misma contra la sentencia dictada por el Tribunal Superior de Justicia de Extremadura (TSJEx), según ha informado el medio Confilegal.
El TSJEx calificó en un principio su despido como procedente tras haber quedado probado que usó de forma fraudulenta el programa de fidelización de puntos de clientes para beneficiarse de ellos.
Tras esto, la empleada acudió al Alto Tribunal alegando que no se le había aplicado la teoría gradualista al imponer la sanción más grave, que es el despido, ni se había tenido en cuenta su antigüedad y la falta de antecedentes, agrega el mismo medio.
Sin embargo, los magistrados inadmitieron el recurso a través de un auto dictado el 11 de julio de 2023. Pero no todos los tribunales dieron la razón a la empresa ya que en primera instancia dieron la razón a la trabajadora.
La empleada comenzó a trabajar en la cadena de supermercados en junio de 2005. El 25 de noviembre de 2020 sobre las 09:30 un cliente realizó una compra que generó un cupón canjeable por importe de 23,60 euros que correspondía a la promoción "Black Friday 20% en todos los jamones o paletas”"que podía utilizarse en cualquier supermercado del 30 de noviembre al 14 de diciembre.
Sin embargo, la trabajadora vinculó la compra a su DNI, por lo que el cupón se generó a su nombre en vez de al del cliente, y quedó vinculado a su tarjeta de socia del Club Carrefour acumulándose también la compra en el "cheque ahorro" de la empleada. El ticket no se emitió en papel porque el cliente tenía seleccionada la opción de enviarlo en formato digital.
Poco después, la trabajadora acudió al mostrador de Atención al Cliente. Allí le pidió a una compañera que le generase el cupón de descuento correspondiente a la compra porque "el sistema informático no lo había emitido".
Al acceder al ticket la empleada de atención al cliente accedió a otra base de datos para identificar al consumidor y llamarle para decirle que se lo había olvidado en el establecimiento. Sin embargo, en la base de datos aparecía el nombre de la cajera, por lo que tuvo que comunicarlo a sus superiores. Para no dejar rastro, la cajera le pidió que borrara el ticket.
Ante esta situación, el 22 de diciembre le comunicaron que estaba despedida por cometer hechos calificados como muy graves. Y añadieron que los cupones "están destinados al disfrute de los clientes teniendo por finalidad lograr una mayor fidelización de la clientela hacia la compañía por medio del disfrute de promociones y descuentos en la realización de futuras compras en cualquier hipermercado dentro de un determinado periodo de tiempo".