Ideas para disfrazarse por Halloween en familia

Halloween lleva mucho tiempo siendo mi festividad favorita. Empiezo a planearlo todo con meses de antelación. A veces tengo ideas para el próximo año antes de quitarme el disfraz del año en el que estamos.

En el mes de agosto ya empiezo a tener pesadillas; sueño con que es Halloween y que se me ha olvidado prepararlo todo. De hecho, el único año en el que pasé de disfraces, que fue en mi segundo año de universidad, acabé en el hospital. He aprendido la lección.

Aquí están los disfraces que hemos llevado los últimos años. Me encanta incluir a toda la familia en la diversión. Excepto al gato. Ese rollo no va con él.

2015 fue un año difícil para nuestra familia. Mi hijo nació dos meses antes de lo previsto y yo estaba agotada. Estaba claro que necesitábamos un poco de magia en nuestras vidas. Vestimos a nuestro hijo de Harry Potter y yo me disfracé de Nimbus 2000. Nuestra hija fue de Hermione y mi marido del profesor Snape. Y el perro, de Dobby, el elfo doméstico. En la foto no se ve, pero lleva un calcetín colgando del collar.

Esos detallitos son los que más me gustan. Los libros que llevaba Hermione estaban huecos por dentro y servían como recipiente para guardar los caramelos. Y Harry llevaba un chupete con forma de snitch dorada.

No quería ponerle un disfraz a un niño de seis meses para que se le estropeara. Así que dejé en la guardería a las 7 de la mañana al Doctor con su destornillador sónico y su fez ultra guay. Los fans de Doctor Who también reconocerán la aterradora grieta de la calabaza.

Mi hija quería ir de medusa en 2014, así que compramos un paraguas transparente y lo decoramos con plumas y luces led para que brillara en la oscuridad. Aprovechando la temática del brillo en la oscuridad, yo me disfracé de la constelación Orión.

A la vista está que no creo que los disfraces de Halloween tengan que dar miedo. Y este era simplemente adorable. Yo me disfracé de Rainbow Brite, nuestra hija se vistió de duende, mi marido del malvado Murky Dismal y el perro iba disfrazado del caballo de Rainbow Brite.

Este fue el primer año en el que me puse creativa de verdad. Me disfracé de sol que sobresalía entre unas nubes que descargaban lluvia. Mi hija era el arcoíris. Pinté de color dorado un cubo de plástico con forma de calabaza para que fuera la olla dorada del final del arcoíris. Mi marido se disfrazó de rayo, pero, no sé por qué, no tengo ninguna foto decente suya.

Cuando acabó Halloween, pegué mi nube y el rayo de mi marido en un contrachapado y lo colgué de la pared a modo de decoración.

Las pesadillas por no tener el disfraz perfecto este Halloween ya han empezado a hacer de las suyas, pero tengo planeado rematar nuestros disfraces pronto. Sígueme en Facebook si quieres ver nuestras fotos el 1 de noviembre.

Rhiannon Giles es una madre agobiada que en ocasiones se plantea llevar a sus hijos al circo y dejarlos allí. Tiene problemas con el sarcasmo y escribe con regularidad en rhiyaya.com. Para estar al día de sus publicaciones, síguela en Facebook y en Twitter.

Este post fue publicado originalmente en la edición estadounidense de 'The Huffington Post' y ha sido traducido del inglés por Lara Eleno Romero.