Von der Leyen apuesta por ampliar la UE como "la mejor inversión en paz, prosperidad y seguridad"
La presidenta de la Comisión Europea pronuncia ante el Parlamento Europeo su último discurso del estado de la Unión antes de las elecciones de junio.
ESTRASBURGO (FRANCIA). Ante un hemiciclo a medio gas y con la bancada de la extrema derecha deseando no haber acudido de puro hastío que demostraban —de algún eurodiputado costaba saber si estaba despierto o no en su escaño—, la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, ha pronunciado su último discurso del estado de la Unión ante el Parlamento Europeo en Estrasburgo.
Un discurso de más de una hora en el que Von der Leyen ha apostado por la ampliación del club de los 27 a una unión que supere los 30 miembros como la "mejor inversión en paz, prosperidad y seguridad". "Es hora de que Europa vuelva a tener amplitud de miras y escribamos nuestro propio destino", ha pedido a los presentes, entre quienes se encontraban el ministro de Asuntos Exteriores español, José Manuel Albares, como representante de la Presidencia de turno de la UE, que este semestre recae en España.
También estaba en el hemiciclo el escritor colombiano Héctor Abad, quien se encontraba con la también escritora ucraniana Victoria Amelina en julio de este año cuando un misil ruso bombardeó el restaurante en el que cenaban. Ella falleció. Él resultó herido. Este miércoles ha sido invitado por Von der Leyen a presenciar el debate en Estrasburgo.
Obviamente, la presidenta de la Comisión no ha dejado de hacer referencias a Ucrania durante toda su alocución. "El futuro de Ucrania está en nuestra Unión", ha aseverado Von der Leyen, quien ha anunciado que la Comisión propondrá ampliar la protección temporal a los ucranianos en la UE, que les permite tener permisos de trabajo con su estatus de refugiados, entre otras cuestiones.
Ucrania es uno de los países que optan a adherirse a la Unión Europea. Uno de tantos. "Sé lo importante que es tener a la UE en perspectiva para muchos países", ha reconocido Von der Leyen, que ha apostado por la ampliación para "no dejar atrás a nuestros conciudadanos europeos" y responder "a los intereses estratégicos de Europa".
Ante las reticencias de muchos de los presentes, la presidenta de la Comisión ha concedido que esta ampliación no puede ser gratuita y ha recordado "la importancia de los informes sobre derechos humanos en la Unión". Informes que, ha anunciado, se abrirán "a países en vías de adhesión, para que puedan ponerse al día más rápidamente" y así estén "en pie de igualdad" con los estados miembros, lo que "les ayudará en sus procesos de reforma" para poder acceder al club europeo.
"La adhesión se basa en los méritos y la Comisión siempre defenderá estos principios", ha insistido Von der Leyen, quien ha asegurado que Ucrania ha dado "grandes pasos" desde que es candidata. En todo caso, la dirigente europea ha pedido "dejar atrás viejos debates binarios sobre la ampliación". "La cuestión no es o profundizar en la integración o ampliar la Unión. Podemos y debemos hacer ambas cosas para darnos mayor peso geopolítico y capacidad de actuar", ha asegurado.
El Pacto Verde, reto primario
A menos de un año de las elecciones, en las que muy probablemente Von der Leyen opte a la reelección pese a no haberlo anunciado aún, la máxima representante de la Comisión ha repasado cuáles son, a su juicio, los grandes retos a los que se enfrenta la UE. Principalmente, el Pacto Verde como "epicentro de nuestra economía" y "respuesta a la llamada de la historia" en un contexto de grandes desastres naturales —"un planeta en ebullición", ha dicho—, que han provocado muchos problemas últimamente en países europeos como Grecia y España, ha recordado.
Este Pacto Verde, ha dicho la presidenta de la Comisión, surgió como una respuesta a la necesidad de preservar el planeta, pero se ha convertido en "una oportunidad de preservar nuestra prosperidad futura" al "convertir la agenda económica en agenda climática" que ha dado "un rumbo de inversión" que ya da "frutos de crecimiento". Von der Leyen, de la familia conservadora, se ha mostrado ferviente defensora de conjugar "modernización y descarbonización de la industria" como un "objetivo esencial para la futura competitividad de Europa". Para ello, ha prometido el apoyo de la Comisión "a la industria europea en todas las fases de su transición".
Durante su discurso, plagado de apuntes sociales, Von der Leyen ha apostado por "la justicia en la economía mundial" frente a la deslealtad de países como China, de los que ha pedido no desligarse pero sí protegerse. También ha reclamado "un diálogo estratégico sobre futuro de la agricultura en Europa" para que "agricultura y preservación de la naturaleza vayan de la mano".
Migración, empleo y competitividad
Otro aspecto fundamental de su discurso ha ido dirigido al Pacto Migratorio, que Von der Leyen considera "una oportunidad histórica" para que el Parlamento y la Comisión den respuesta a un problema histórico al que se enfrenta Europa. "Está a nuestro alcance, nunca hemos estado tan cerca de este pacto", ha aseverado. "Demostremos que podemos llevarlo con eficacia, terminemos el trabajo", ha reclamado.
En este sentido, la presidenta comunitaria ha reclamado mejoras laborales, la incorporación de los migrantes al mercado de trabajo —"necesitamos migración cualificada", ha asegurado— y un respaldo a las pymes a la hora de reducir la burocracia administrativa.
"El futuro de nuestro continente depende de los pasos que demos hoy", ha dicho Von der Leyen al final de su intervención, en la que ha apostado por "una Unión que defienda a los ciudadanos europeos, que les proteja y que esté con ellos en las batallas cotidianas".
"Hay que escuchar su voz. Si es importante para los europeos, es importante para Europa. Es el momento de demostrarles que podemos construir un continente en que uno pueda ser quien es, amar a quien quiera, y aspirar a lo que desee. Un continente reconciliado con la naturaleza, que marque el camino en las nuevas tecnologías. Un continente unido en libertad y paz. Es el momento en que Europa responda a llamada de la historia. Larga vida a Europa", ha concluido.