Sánchez propone que los medios detallen cómo se financian y fijar por ley que haya debates electorales
El presidente del Gobierno ha presentado en el Congreso su propuesta para combatir las fake news y vigilar la financiación pública que recibe la prensa.
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha presentado este miércoles su prometido plan de regeneración democrática, enfocado principalmente en combatir las fake news y poner la lupa en la financiación pública que reciben los medios de comunicación.
Durante su intervención a petición propia ante la Cámara, el líder socialista ha advertido que las técnicas de desinformación "son peligrosas porque van contra el pilar más importante de la democracia: el de la gente". "Es el ciudadano quien decide con su voto qué dirección debe seguir el país. Para ello, el ciudadano debe discernir entre la verdad y la mentira, entre los datos y los relatos, y garantizarle este derecho ante el auge de las nuevas tecnologías resulta ahora aún más complicado".
A modo de ejemplo sobre esa desinformación, Sánchez ha dado algunos datos. "El 90% de los españoles se ven expuestos a noticias falsas de manera recurrente, según estudios. Y al 86% le cuesta discernir las noticias verdaderas de las falsas. Cada año se producen en nuestro país miles de bulos, que se difunden un 70% más rápido que las noticias verdaderas. Esos bulos han logrado que el 18% de los españoles considere hoy en día que nuestra economía está en crisis o que el 34% tema que alguien ocupe su casa. Que el número de inmigrantes que convive con nosotros sea el doble que la realidad o que el cambio climático no está causado por la acción del ser humano. Las fake news no surgen por accidente, hay alguien que dedica tiempo y recursos económicos a distribuirlos para erosionar la confianza de los ciudadanos en la democracia y sus instituciones", ha señalado.
De hecho, el presidente del Gobierno ve probado un vínculo "entre la circulación de bulos y el aumento de los delitos de odio". "Los enemigos de la democracia usan las fake news para envenenar la convivencia", ha dicho.
Por ese motivo, Sánchez ha anunciado que abrirá en los próximos días una ronda de contactos con todas las formaciones políticas (a excepción de Vox) para "dotar a la democracia de más transparencia y más rendición de cuentas, tanto en el poder ejecutivo, en los medios y también en el poder legislativo".
En lo que respecta a los medios, el paquete más ambicioso, Sánchez ha reiterado su compromiso de que todas las cabeceras informativas tengan que informar sobre los fondos públicos recibidos en concepto de publicidad, del mismo modo que esos fondos deberán asignarse con criterios públicos, proporcionados y no discriminatorios. Además, exigirá a los medios que hagan pública su propiedad y detallen cómo se financian. "Los ciudadanos deben conocer las fuentes de financiación de los medios de comunicación, sus accionistas o propietarios y sus audiencias para evitar fraudes en la inversión publicitaria. Y también nos debemos asegurar que haya partidos que no compren líneas editoriales con el dinero de todos los contribuyentes", ha dicho.
Sánchez basa su defensa de estas propuestas en el artículo 20 de la Constitución, que reconoce el derecho del ciudadano a recibir libremente información veraz, y en el Reglamento Europeo de Libertad de los Medios de Comunicación aprobado el pasado mes de marzo en el Parlamento con el apoyo de todos los grupos a excepción de la ultraderecha. "No es la intención del gobierno repartir carnés de fiabilidad entre los medios. Es una buena noticia salvo para que aquellos que han convertido la mentira en un negocio rentable", ha explicado.
En base a esa normativa, Sánchez también se ha comprometido a reforzar el derecho al honor y a la rectificación para reparar públicamente a aquellas personas conocida que son investigadas judicialmente en casos que finalmente no acaban en juicio.
Durante su larga intervención, de más de una hora, el presidente del Gobierno también ha anunciado que presentará una nueva ley de administración pública abierta que mejore la calidad de la información gubernamental y un paquete de cien millones de euros para la digitalización de los medios de comunicación. Y sobre la ley mordaza, que ayer adelantó Sumar, Sánchez se ha limitado a asegurar que se reformará la norma en lo relativo a "la libertad de expresión".
Por último, Sánchez también ha propuesto reformar los reglamentos del Congreso y el Senado para endurecer las sanciones a aquellos diputados y senadores que no presenten su declaración de bienes y actividades o que lo hacen con información falsa o incompleta. Y ha propuesto para la discusión con el resto de partidos una reforma de la ley electoral para establecer la obligatoriedad de celebrar debates electorales y para que las empresas demoscópicas acompañen en sus encuestas publicadas la información relativa a los microdatos y la metodología utilizada para sus estudios.