Un debate diferente en su forma y en su fondo: de qué sí y de qué no se ha hablado
Varias novedades con respecto al cara a cara entre Sánchez y Feijóo.
Una escena nunca vista. Jamás, en la historia de la democracia española, se ha vivido un debate entre candidatos a presidir el gobierno en formato de tres... Y mucho menos en una versión incompleta, en la que no estaban todos los 'grandes'. La ausencia voluntaria de Núñez Feijóo del debate de RTVE ha condicionado la 'batalla' televisiva.
A lo largo de 90 minutos absolutamente cronometrados, Pedro Sánchez, Santiago Abascal y Yolanda Díaz han confrontado posturas, unos más que otros, en materias claves como economía, vivienda, empleo, igualdad, sanidad... pero también en los siempre esperados pactos postelectorales. Nada nuevo y, como era previsible, han sido campos de especial enfrentamiento entre bandos... aunque sin salirse de unas mínimas formas.
En cuanto al contenido sí ha habido cambios en la nómina de temas que se han quedado sin salir en los atriles. Afortunadamente, menos que en el cara a cara Sánchez-Feijóo del pasado lunes 10 de julio.
Muy pronto han desaparecido dos de los más llamativos 'olvidos' de la anterior cita. El sector primario y la emergencia climática han aparecido en el menú del debate a tres apenas comenzaba. Y, entre reproches del Gobierno a Abascal, y de este a la dupla de izquierdas, se ha vuelto posteriormente. También se ha hablado de ciencia. Poco, pero se ha hablado que ya es algo.
Algo parecido con lo que ha ocurrido con la Cultura. Como tal no se ha hablado de ella, ningún plan, ninguna medida concreta, pero sí se han referido, Sánchez y Díaz, especialmente el primero, a la censura. En las últimas semanas, los nuevos gobiernos municipales de PP con Vox han censurado varios actos culturales, que no ha pasado por alto el presidente del Gobierno. La cultura ha aparecido, incluso, en su minuto de oro.
Las menciones no se han extendido a cuestiones como la tecnología, la inteligencia artificial, el deporte o la España vaciada, salvo una mención, vacía de contenido, del líder de Vox en el primer tramo de debate.
Un espectáculo televisivo diferente en el que también se ha hablado de cosas nunca (o rara vez) vistas.