Begoña Gómez no declara en la Asamblea de Madrid: "Todo esto tiene un objetivo político"
La mujer del presidente del Gobierno se ha acogido a su derecho a no declarar en la comisión de investigación de la Asamblea impulsada por el PP de Madrid.
La presencia policial en los exteriores, dos camiones de Hazte Oír conta Pedro Sánchez y Begoña Gómez y media docena de manifestantes ya pronosticaban desde primera hora el día candente que se iba a vivir en la Asamblea de Madrid. El PP de Ayuso ha sentado a la mujer del presidente del Gobierno en la comisión que ellos mismos han impulsado gracias a su mayoría absoluta para que declare ante los diputados como codirectora de la Cátedra de Transformación Social Competitiva y hablar si recibió algún trato de favor por ser la mujer del presidente del Gobierno, tal y como investiga el juez Peinado.
"Desde hace 25 años trabajo en consultoría y docencia. Hace doce años que inicié una colaboración con la Universidad Complutense de Madrid (UCM) como codirectora de un máster de títulos propios para formar a profesionales en proyectos de liderazgo y solidaridad. En 2020 se amplió a una cátedra extraordinaria no remunerada, una práctica habitual en las universidades", ha comenzado diciendo Gómez a las primeras preguntas de la portavoz del PP en la comisión, Mercedes Zarzalejo.
Y hasta ahí. Begoña Gómez, a recomendación por su abogado, se ha acogido a su derecho a no declarar alegando que la comisión tiene "un objetivo político evidente". "Solo tienen que fijarse en la lista de denunciantes. Por esta razón me voy a acoger a mi derecho de no responder a sus preguntas tras cumplir con mi obligación de comparecer en esta comisión. Más pronto que tarde la verdad pondrá todo en su sitio", ha añadido mientras ha guardado silencio durante toda intervención del PP.
A continuación, el PP no solo se ha ceñido a su relación con la Universidad Complutense de Madrid, sino que incidido en preguntas como la relación de Begoña Gómez con la empresa Globalia cuando, en 2020, fue directora del África Center, en las que la UCO, en dos informes entregados al juez Peinado, no ha apreciado delito alguno. Con respecto a la UCM, Zarzalejo ha acusado a Gómez de haberse "apropiado" de los fondos de la universidad pública madrileña y de haber llegado, sin formación, a dirigir una cátedra entre varias interrupciones de los tres diputados del PSOE, que se quejaban ante la presidenta de la comisión de "faltas de respeto" y excederse en el tiempo, que incluso han solicitado cancelar la comparecencia ya que Gómez se había acogido a su derecho a no declarar.
A continuación, ha llegado el turno de Vox, donde la diputada Ana Cuartero ha dibujado a Gómez como una "coautora intelectual" de la corrupción del PSOE y ha deslizado que la cátedra, así como los másters que ha dirigido desde el año 2012 son consecuencia de ser la mujer del presidente del Gobierno. "Salvo que los medios de comunicación estén vertiendo un bulo usted no tiene titulación universitaria (...) ¿Además de ser la mujer del presidente del Gobierno qué méritos demostró para ostentar la dirección de una cátedra en la UCM?", indicaba al respecto la diputada de Vox.
"´Tengo que entender su silencio como una afirmación", indicaba asegurado que todo ocurrió cuando Gómez y Sánchez comenzaron a "pisar moqueta en La Moncloa", al que no ha dudado en llamar "autócrata" al presidente del Gobierno ante una callada Begoña Gómez que tan solo miraba a la diputada sin hacer siquiera una mueca. Ni siquiera cuando por quinta vez se ha interrumpido el orden de la comisión cuando la diputada de Vox ha concluido su comparecencia asegurando que quería que constara "en acta que el marido de la compareciente (Begoña Gómez) no ha querido responder al presidente de Vox, Santiago Abascal".
Una comparecencia preparada "a conciencia"
El PSOE había preparado "a conciencia" la comparecencia y la puesta en escena de Begoña Gómez tanto desde Ferraz como desde el PSOE de Madrid con una sinergia de equipos que minimizaran los ataques a Gómez.
Así, ha sido acompañada por el líder del PSOE de Madrid, una docena de diputados y su abogado en los escasos veinte metros que separan el ascensor que lleva al parking a la sala de la comisión en la que ha comparecido ante el centenar periodistas que aguardaban a su llegada en los pasillos de la Asamblea. Dentro de la sala, esperaba buena parte del resto de diputados, que arropaban a Gómez ante las preguntas. También acompañaba a Gómez la portavoz de Más Madrid en la Asamblea, Manuela Bergerot.
Prueba de ello ha sido la intervención de la 'número 2' del PSOE de Madrid, Marta Bernardo, que ha asegurado que a Gómez, "la política no le ha dado nada". "Al revés, le ha restado" asegurando que "lleva 25 años en su trabajo y es difícil que la derecha más rancia lo asuma" entre constantes interrupciones en las que la presidencia de la comisión del PP instaba a que hiciera preguntas a Gómez.
"No existen irregularidades en su expediente profesional, lo único que persiguen es hacer daño al presidente del Gobierno haciendo daño a su esposa", indicaba mientras se preguntaba el por qué el PP llevaba cuatro años bloqueando una comisión de investigación sobre las muertes en las residencias y con varias llamadas a la cuestión pidiendo que realizara alguna pregunta.
Por parte de Más Madrid ha intervenido su portavoz, Manuela Bergerot, que ha protagonizado uno de los momentos más tensos de la comisión de investigación a Begoña Gómez cuando ha sido llamada a la cuestión en tres ocasiones, quedando sin el turno de la palabra. A lo largo de su intervención, ha insistido en criticar al Ejecutivo autonómico de Isabel Díaz Ayuso con diversas cuestiones como la situación de la Universidad Complutense de Madrid, la comida que se ofrece en las residencias o el caso de la pareja de la presidenta madrileña Alberto González Amador, que en los próximos días celebra su juicio para asumir una multa económica por dos delitos de fraude fiscal. "Además de censurarnos quieren decirnos lo que tenemos que preguntar y lo que no", ha indicado al respecto la de Más Madrid.