¿Advirtió Mazón a Feijóo de lo que pasaría con la DANA un día antes? El líder del PP aseguró estar informado desde el lunes 28
El presidente del Partido Popular dijo que el presidente valenciano le había informado "en tiempo real" de todo lo que ocurría desde el lunes 28, un día antes del desastre de la DANA y 24 horas antes de enviar la alerta a la población.
El martes, día D de la tragedia provocada por la DANA, el presidente de la Generalitat valenciana, antes de centrar su agenda en tal emergencia, tuvo tiempo para reunir de manera habitual al Pleno del Consell, recoger un premio, reunirse con los sindicatos y la patronal y mantener una comida privada hasta las 18.00 horas. No llegó hasta al Comité de Coordinación de Emergencias hasta pasadas las 19.00 horas. Pero si todo esto ocurrió el martes, ¿de qué informó Carlos Mazón a Alberto Núñez Feijóo el lunes? ¿Era consciente el día anterior de todo lo que podía ocurrir?
El jueves 31, cuando el líder del PP visitó Valencia, Feijóo, además de aprovechar la ocasión para atacar al Gobierno, aseguró que Mazón le había estado “informando en tiempo real desde el pasado lunes”, cuando los estragos causados por la DANA sucedieron un día después. Y no solo eso, sino que según Feijóo, Mazón ya le advirtió el martes de que habría “más personas fallecidas”. Si lo que dice el presidente del Partido Popular es cierto, resulta si cabe más incomprensible que el presidente autonómico mantuviera su agenda el martes sin ningún cambio. ¿Pero lo es? ¿Es verdad que Feijóo y Mazón hablaron de lo que podría ocurrir 24 horas antes de que pasase o tan solo fue un exceso del presidente del PP para defender a su líder autonómico?
Desde Génova, consultados sobre la supuesta conversación que Feijóo y Mazón mantuvieron el lunes, si bien no la confirman, aclaran que “el contacto entre ambos es continuo”. Es lo mismo que responden desde la Generalitat valenciana a la pregunta de si antes del martes Mazón advirtió a Feijóo de lo que se venía. “Están en contacto permanente”, se limitan a contestar fuentes del Gobierno valenciano.
Si nos atenemos a los hechos, a pesar de lo comentado el jueves, al menos de manera oficial Feijóo solo informó de que había contactado con Mazón el martes 29, a las 20.40 horas, poco después de la tardía alerta enviada por la Generalitat. “He contactado con Juanma Moreno, Carlos Mazón y Emiliano García-Page ante las noticias de los estragos causados por la DANA”, escribió en X. Lo del lunes es cuestión de confianza.
Hay quien sí tomó decisiones el mismo lunes 28 tras comprobar los avisos de la AEMET. Lo hicieron, por ejemplo, en la Universitat de València. Esa tarde enviaron un comunicado a todo el alumnado informando de la suspensión de las clases. La decisión no le gustó a Mazón. Según han confirmado a eldiario.es testigos del encuentro que mantuvo con sindicatos y patronal, el presidente de la Generalitat “estaba molesto” con la suspensión “al considerarla exagerada”. Eso un día después de que supuestamente hubiera informado “en tiempo real” a Feijóo.
Los vaivenes del líder del PP con su líder autonómico son varios. Mientras todo apunta a que el jueves 31 trató de lavar una cuanto menos insuficiente gestión asegurando que desde el lunes estaban en contacto, Feijóo mantuvo después que el Gobierno central tendría que asumir el liderazgo de intendencia, algo que de facto supondría relegar al propio Carlos Mazón. Primero le apoya, luego le quiere echar, después trata de nuevo de echarle un capote y este lunes, a través de Borja Sémper, evita un soporte sustancial. “Este jueves [Mazón] tendrá la oportunidad de explicar ante los valencianos en sede parlamentaria su gestión y los pasos que va a dar a futuro”, dijo el portavoz del PP.
Pero Mazón parece ajeno a todos estos movimientos, incluso a las manifestaciones del pueblo valenciano que este fin de semana reclamó su dimisión. Del Partido Popular dice sentirse “pleno” apoyo, aunque sea “lo que menos importe”. Y de dimitir, que ahora no toca, que no puede desaparecer justo ahora, aunque sí lo hiciera el martes, incomunicado durante horas en medio del desastre.