La subida de temperatura necesaria para un efecto invernadero desbocado que hará inhabitable la Tierra
Un equipo de científico simula las condiciones que podrían transformar la Tierra en un planeta similar a Venus
Un estudio llevado a cabo por el equipo de astrónomos de la Universidad de Ginebra (UNIGE) y miembros del Centro Nacional de Competencia en Investigación (NCCR) PlanetS (con el respaldo de los laboratorios del CNRS de París y Burdeos) ha alcanzado un hito mundial al simular integralmente el proceso del efecto invernadero desbocado, capaz de convertir un planeta en un entorno inhabitable.
Qué es lo que han descubierto
Los resultados, detallados en la revista científica Astronomy & Astrophysics, advierten que un aumento de solo unas pocas décadas en la temperatura de la Tierra podría desencadenar un "efecto invernadero desbocado" irreversible, transformando nuestro planeta en un lugar severo y hostil, similar a Venus.
En el experimento, los investigadores crearon un planeta similar a la Tierra basado en modelos tridimensionales, con océanos y vida. Pero al hacer un cambio de temperatura en unas pocas décadas desencadenó una reacción en cadena que transformó rápidamente la situación del astro, según informó la Universidad de Ginebra en un comunicado.
Guillaume Chaverot, profesor del Departamento de Astronomía de la universidad y líder del estudio, explicó que "una evaporación de apenas 10 centímetros en la superficie del océano llevaría a un aumento de 1 bar en la presión atmosférica, y en apenas unos cientos de años, la temperatura superficial alcanzaría los 500 grados".
La evolución continuaría hasta llegar a presiones atmosféricas de hasta 273 bares y temperaturas de 1,500 grados, donde el agua de los océanos se evaporaría por completo.
Los científicos también demostraron que, desde las etapas iniciales del proceso, la estructura atmosférica y la cobertura nubosa experimentan cambios significativos, llevando a un efecto invernadero desbocado prácticamente imparable y difícil de revertir. Un ligero aumento en la temperatura media global de la Tierra, consecuencia de un pequeño incremento en la luminosidad solar, sería suficiente para desencadenar este fenómeno y hacer que nuestro planeta sea inhabitable.
Así pues, este estudio busca comprender el proceso del llamado "efecto invernadero desbocado" durante su desarrollo, ya que investigaciones anteriores se centraron principalmente en las etapas previas o posteriores.
A pesar de que la idea de un desbordamiento del efecto invernadero no es nueva, la UNIGE destaca que un planeta puede evolucionar desde un estado templado, como el de la Tierra, hasta un ambiente extremo con temperaturas superiores a los 1000°C debido al vapor de agua, un gas natural de efecto invernadero
Y es que, aunque un poco de efecto invernadero es útil para mantener la temperatura de la Tierra adecuada para la vida, un exceso puede llevar a la evaporación de los océanos y a un aumento significativo del vapor de agua en la atmósfera, desencadenando un "efecto invernadero desbocado".
A la caza de un nuevo sistema solar
Además, el estudio también pretende ser especialmente útil para analizar las posibilidades de vida en exoplanetas, fuera del sistema solar, observando si sus patrones de nubosidad serían similares a los de la Tierra, lo que podría hacerlos habitables, o si mostrarían signos de "efectos invernadero desbocados".
Cabe destacar que Michel Mayor y Didier Queloz, dos investigadores de la Universidad de Ginebra, descubrieron el primer exoplaneta en 1995, lo que les valió el Premio Nobel de Física en 2019.