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Preocupación por el peligroso hallazgo de unos pozos petrolíferos huérfanos fuera del radar humano

Preocupación por el peligroso hallazgo de unos pozos petrolíferos huérfanos fuera del radar humano

Pueden liberar metano a la atmósfera y contaminar las aguas subterráneas.

Barriles de petróleo, en una imagen de archivoLuke Sharrett / Bloomberg vÍa Getty Images

La Inteligencia Artificial (IA) ha logrado hallar más de mil pozos petrolíferos abandonados que se encontraban ocultos en mapas antiguos de Estados Unidos y que suponen un riesgo importante para el medioambiente y la salud.

Los mencionados pozos petrolíferos son peligrosos debido a que pueden liberar metano (un potente gas de efecto invernadero) a la atmósfera y, además, contaminar las aguas subterráneas.

El descubrimiento de estos pozos se ha dado a conocer en un estudio publicado en la revista Environmental Science & Technology. Los investigadores han destacado al respecto que estos pozos suelen estar “fuera de la vista y fuera de la mente”, por lo que son un gran peligro casi imposible de localizar.

Para poder llevar a cabo esta difícil tarea, los autores del estudio han entrenado un programa de aprendizaje automático de última generación para reconocer símbolos de pozos de petróleo y gas en mapas topográficos históricos.

Tal y como recoge el medio de comunicación portugués Zap, gracias a esa importante labor de la Inteligencia Artificial, los investigadores han conseguido identificar más de un millar de pozos no documentados.

Una investigación dividida en dos fases

En concreto, el método usado por los científicos se ha dividido en dos etapas. En la primera de ellas, la IA ha analizado mapas históricos georreferenciados a través del citado programa de aprendizaje automático.

Y en la segunda fase los pozos detectados se han cruzado con las bases de datos estatales y federales de pozos documentados. Si un pozo concreto detectado por la IA se encontraba a más de 100 metros de cualquier pozo documentado, se marcaba como posible pozo de petróleo abandonado o huérfano.

En ese sentido, Charuleka Varadharajan, científico del Berkeley Lab y autor principal del estudio, ha explicado que “con nuestro método, fuimos conservadores en cuanto a lo que se consideraría un posible pozo huérfano no documentado”.

“Optamos intencionadamente por tener más falsos negativos que falsos positivos, ya que queríamos ser cuidadosos con las ubicaciones individuales de los pozos identificados mediante nuestro método”, ha añadido Varadharajan.