Se busca mujer socialista para pelear contra Pepu y De la Rocha
Las feministas del PSOE, las primeras en salir del shock que ha ocasionado entre la militancia la decisión de Sánchez de presentar a Pepu a las primarias.
Las feministas del PSOE han sido las primeras en salir del shock que ha ocasionado entre la militancia la decisión de Pedro Sánchez de presentar a Pepu Hernández a las primarias para la alcaldía de Madrid. "No habrá primarias solo entre Manuel de la Rocha y el 'dedazo' del presidente. Por lo menos una mujer se presentará", afirma, convencida, una destacada socialista. A estas horas, todas las presiones se dirigen hacía Purificación Causapié, aunque de entrada sus amigas están convencidas de que dirá que no. Además de Causapié, las presiones van a caer también sobre Manuel de la Rocha, el candidato que lleva peleando desde el pasado octubre. "Sí, lo sé. Me van a presionar, pero ya podéis decir con tranquilidad que no voy a desistir", afirma el propio De la Rocha.
En las agrupaciones los whatsapps echan humo. "Las agrupaciones están incendiadas, dicen que se les ha tomado el pelo. Esto ya no va de 'pedristas' o no 'pedristas', se ha hecho lo de siempre: el dedazo. Si hay un rival puede sacar un buen resultado", explica un diputado mientras nos muestra las conversaciones en el móvil.
El otro frente que se abre ahora es el de las mujeres. Cristina Narbona, Reyes Maroto, Beatriz Corredor, Paca Sauquillo, o Pilar Llop, jueza y delegada del Gobierno contra la Violencia de Género, son algunas de las mujeres que le han dado el 'no' a Sánchez para presentarse por la capital. Además de los varones más o menos conocidos: Rubalcaba, el juez y ministro Marlaska y Javier Solana. Entre otros.
Lo que sí se ha confirmado en la reunión de miembros de la Ejecutiva esta mañana es que ningún miembro de la cúpula del PSOE supo, hasta ayer por la tarde, la decisión de Sánchez con Pepu Fernández, al que los maledicentes ya han rebautizado como 'Pepu Beitia', por la atleta que ha sido candidata del PP a Cantabria durante solo 15 días. "Nos consta que el presidente lleva un año buscando nombres, y lo ha hecho con intensidad, pero era complicado. La política se ha convertido en un lugar de alto riesgo, y no es nada fácil decir 'sí', ni dentro del socialismo, entre los más reconocidos pero ya mayores, ni fuera, entre independientes con prestigio. Lo que les están haciendo a los miembros del Gobierno, con la persecución desencadenada por el PP, es terrible", explica un miembro de la cúpula socialista, cercano al presidente.
A medida que transcurren las horas, tras la impresión inicial por la elección del seleccionador de Baloncesto, comienza la digestión con la píldora de omeprazol correspondiente. "De entrada, ya estamos en el debate. Eso es un salto importante, porque estábamos desaparecidos y la elección de Pepu nos pone en primera fila otra vez. Además, tanto Manuel de la Rocha como Pepu Fernández van a debatir con limpieza, dado el talante de ambos. Hay partido, eso seguro", razonaba otro miembro de la Ejecutiva, intentando tragar la porra de media mañana ante el café con leche.
De que hay partido está también seguro Manuel de la Rocha, quien ha decidido subirse al carro del optimismo y una cierta confraternización, porque "las primarias tienen que ser el primer momento en el que los socialistas salgamos hacia fuera", insiste también, y confirma que no se amedrentará frente a las presiones, que ya las ha tenido, aunque elegantes. No hay que olvidar que su hijo es jefe de la oficina económica de Moncloa y su nuera, concejala del Ayuntamiento de Madrid.
Por ahora, José Manuel Franco, el secretario general del PSOE por Madrid, le sugirió a De la Rocha el pasado otoño -anunció su candidatura a primarias en octubre- que esperara, pero nada mas. De la Rocha ya ha explicado en varias entrevistas que si hubiera habido otros candidatos que a él le merecieran confianza -como Narbona, Rubalcaba e incluso Zapatero- hubiera retirado su candidatura, pero no ha sido el caso hasta ahora.
Y hasta aquí el guante blanco. Porque tras las manifestaciones conciliadoras de la cúpula y de los candidatos, lo que siguen humeando son los enfados. El de la militancia, que "estamos hartos de que La Moncloa tire de lo independientes, cuando tenemos banquillo de sobra. Es un desprecio brutal y encima a dedo", lanzan desde uno de los distritos más importantes de la capital, situación confirmada en fuentes de la FSM. "Los washapp arden. De la Rocha, a estas horas, puede ganar unas primarias. Es verdad que en la calle no será muy reconocido, pero para los militantes es una garantía de honradez y encima, conoce la capital. Estamos hartos, de nuevo vuelve a poner el dedo el presidente. Ya tuvimos lo de Sebastián y demás. Anda ya". El enfado cunde y no atienden a razones, cuando se les recuerda que el seleccionador va a competir en unas primarias más.
Pero donde la cosa se pone más difícil es entre las feministas socialistas. En los tiempos que corren, con un 8 de marzo conmemorativo y reivindicativo del año pasado, con Vox a las puertas y ese discurso contra la violencia de género, no están dispuestas a dejar la batalla de las primarias en manos de dos hombres. Uno del presidente y otro, de la vieja guardia. Por muy majetes que sean ambos.
El hecho de que haya habido más mujeres que hombres que han dado calabazas a Sánchez para presentarse frente a Manuela Carmena, interpretan que es una muestra de respeto hacia la figura de la alcaldesa -amiga personal de muchos de los nombres que ha manejado el presidente y le han dado el 'no'- y las escasas esperanzas de levantar la bandera. Pero no se dan por vencidas, ahora, hay que encontrar la oveja dispuesta a cargar luego con la derrota. "Pero el avance de la derecha, lo que está pasando con Vox, nos tiene que hacer reflexionar. Una socialista y Manuela podrían hacer buen tándem por Madrid contra los de Abascal, Cs y Casado", afirma una parlamentaria, que no pierde la esperanza de que "Puri Causapié, que no quiere, pero se lo merecería por lo trabajadora que es, diga 'sí'. Pero hay más".
En resumen, se busca una mujer capaz de sacrificarse y de hacer frente al evidente cambio de ciclo que ya se estamos viendo en todo el mundo. Ahí es nada.