Nadia es una superviviente del genocidio que Daesh lleva más de dos años ejecutando contra la minoría yazidí en Irak. Desde que los yihadistas, enardecidos por la conquista de Mosul, lanzaron una voraz ofensiva para expandir su dominio hasta las montañas, hogar durante siglos de los yazidíes, y asaltaron en agosto de 2014 sus pueblos en el Monte Sinjar, en el norte de Irak, segando la vida de cientos de hombres y raptando a cerca de 6.000 mujeres y niños.