Un ingeniero de caminos o un profesional sanitario que acumulara el bagaje de fracasos que atesoran los expertos en demoscopia perderían sus trabajos más pronto que tarde. Curiosa profesión ésa, en la que uno puede equivocarse de manera garrafal sin que los errores tengan aparentes consecuencias.
El fracaso de Pedro Sánchez en la formación de un gobierno se debe superar con altura de miras. Ahora toca redefinirse. Ahora toca gobernar o dejar gobernar. La izquierda, hasta ahora fragmentada, debe aceptar el mandato ciudadano conferido, que no consiste sino en dar un vuelco a las políticas económicas y sociales de estos últimos años.