El mandatario hará balance de la Presidencia española el miércoles en la Eurocámara y luego se trasladará a Bruselas, donde tiene el último Consejo Europeo del año.
La ciudad andaluza acoge una cumbre informal de los Veintisiete que servirá para diseñar el crecimiento hacia el este, que cambiará por completo la Unión. El Pacto de Migración y Asilo, cuya última pata se acaba de desbloquear, también bajo foco.
El Europarlamento vota masivamente una resolución en la que expresa sus dudas de que Orban deba llevar el semestre, por sus violaciones del estado de derecho.
No lo ha hecho por la carta remitida por el PP europeo, sino que la decisión "ya fue avanzada el pasado martes 30 de junio a la Dirección General de Comunicación del Parlamento Europeo, 24 horas después" del adelanto electoral.
'Politico' informa de que el líder de los populares europeos, Manfred Weber, pide un retraso a septiembre "para permitir que el recién elegido presidente presente las prioridades del Consejo fuera del ámbito político nacional".
Los retos a los que se enfrentan la nueva Presidencia holandesa semestral y, por ende, el proyecto europeo, continúan siendo los mismos temas que los dirigentes europeos llevan meses discutiendo con escasos avances debido a la preocupante supremacía de la intergubermentalidad y las resistencias de los Estados a ceder soberanía.