La sala está llena de diputados que han venido a votar sin conocer, ni tan siquiera superficialmente, el alcance de lo que han aprobado. Alguno del PP hasta se marcha corriendo antes de que termine la votación porque pierde el avión, y eso sí que no.
Ni estamos todos al mismo nivel en Internet, ni tenemos las mismas oportunidades. Al contrario, en el ciberespacio el tamaño y los recursos importan tanto o más que en el mundo físico. Para triunfar o tener repercusión en la web hay que subirse a lomos de una plataforma potente.
Creo que es una buena noticia la sentencia del Tribunal de Justicia de la Unión Europea, dando la razón a Mario Costeja y obligando a Google a estudiar caso por caso las peticiones de particulares que quieran retirar informaciones lesivas, pero intrascendentes socialmente, referentes a su persona.