Carta abierta a todos los que querrían ser presidente
EEUU nunca ha reconocido formalmente la atroz maldad de la esclavitud, ni se ha disculpado por ella. Pido a republicanos y demócratas que pidan perdón a la ciudadanía estadounidense. Nuestra constante negativa a disculparnos es aún motivo de vergüenza y disensión en nuestro país.