"Ojalá no hubiera tenido problemas para desarrollar toda su imaginería a un ritmo estable; quién sabe de cuántas obras suyas, de esas más personales, nos hemos privado".
'La hora chanante' nunca hubiese existido sin Cuerda. Ni tampoco 'Muchachada Nui' o 'Museo Coconut'. Ni siquiera el humor de Cruz y Raya o de José Mota.
"El odio, la crueldad... Eso es el infierno". Esta escena que pertenece a 'La lengua de las mariposas', un film protagonizado por Fernando Fernán Gómez, es uno de tantos momentos emotivos de la filmografía de José Luis Cuerda. El cineasta ha fallecido este martes 4 de febrero a los 72 años.
Alberto me recibe en palacio, es decir, en el Teatro del Barrio, sentado en un sofá tomando un café. Al verme entrar me ofrece un café, y después de cruzarme todo Madrid, chuparme varios atascos y llegar media hora tarde, le digo que algo que me desestrese. "Un café doble, entonces", y sonríe.
La mayoría de nosotros tenemos un recuerdo de la infancia con un coche que idolatramos y nos fastidió que nuestros padres se deshicieran de él. Decían que estaba viejo o simplemente que había que cambiarlo sin dar más explicaciones. Juan Luis Cano, Juan Ramón Lucas, Cristina Pardo, Pancho Varona, José Luis Cuerda, Elpidio Silva y Miguel Ángel Revilla cuentan la historia de esos coches para toda la vida.
Gracias a todos los que ya os habéis subido, Juan Luis Cano, Pancho Varona, Juanra Lucas, Cristina Pardo y al resto de invitados tan interesantes, gracias de antemano a los que vengáis a partir de septiembre por prestarme media hora de vuestro tiempo mientras nos damos una vuelta en un Seiscientos por Madrid.
Cuerda tiene asegurado un bonito lugar en la memoria colectiva gracias a Amanece, que no es poco pero, como resulta frecuente cuando se da en el clavo de un modo tan espectacular, esta película ha eclipsado otros de sus logros: ser el impulsor del talento de Alejandro Amenábar o el responsable de El bosque animado y La lengua de las mariposas