Lo que asoma tras la enésima crisis entre el PSC y el PSOE no es sólo una disputa orgánica, ni una batalla por el control del censo para unas futuras primarias. Lo que Javier Fernández y Miquel Iceta empezarán a discutir esta semana es un profundo debate ideológico sobre la planta territorial de España, sobre naciones histórico-culturales o político-jurídicas y sobre soberanías compartidas y mal entendidas.