"Los políticos se lanzan a presidir funerales, justificar estrategias mezquinas, defender las cadenas perpetuas y pedir votos. La gente se lanza a gritar 'vivan las cadenas perpetuas', viva la pena de muerte...".
"Cada vez me pasa más, como juez de guardia, encontrarme con cadáveres de ancianos que llevan muchos días muertos, en avanzado estado de descomposición.No sé si está fallando la intervención social o los lazos familiares. Pero indica el tipo de sociedad hacia el que nos dirigimos".