La coalición que aspira a desbancar a Netanyahu tiene enormes retos en economía o seguridad que dependen, aún, de que el primer ministro les quite algún tránsfuga.
La coalición que lidera Lapid tiene 58 escaños pero necesita al menos 61. Necesita de los partidos árabes. Sin contar con la posibilidad de tránsfugas que impidan la suma.
La ONU ruega ayuda a los estados, el mundo está en crisis. Israel, como siempre, será quien decida si abre la puerta a la ayuda y cuándo. Y los palestinos, a la espera.
La alta comisionada para los Derechos Humanos, Michelle Bachelet, sostiene que hay "dudas" sobre los principios de distinción y proporcionalidad en el daño.
El secretario de Estado Antony Blinken se compromete con la seguridad de Tel Aviv, estrecha lazos con Abbas y promete dinero para la reconstrucción de la Franja.
El secretario de estado norteamericano quiere usar el "espacio creado" para "abordar una larga lista de problemas y desafíos subyacentes" del conflicto.
15 años ha estado el líder del Likud manejando el timón como primer ministro. Ya no más. Una alianza impensable de ocho partidos le ha quitado el trono.
La Operación Guardián de los Muros evidencia, de nuevo, una enorme asimetría entre los bandos, por más que ambos violen los principios de las leyes de la guerra.
Un grupo de demócratas, encabezados por la congresista, evidencia que no todo el partido está en la línea presidencial del apoyo sin fisuras a Tel Aviv.
El sistema de defensa intercepta el 90% de los cohetes lanzados desde Gaza por las milicias palestinas y se ha convertido en un elemento esencial de defensa.