Por un lado, la ASEAN defiende la soberanía de los atacados, pero por otro se niega a llamar invasor a Rusia. Aún hay relaciones de dependencia y Moscú trata con ahínco de expandir su influencia en la zona.
"No veo otra razón detrás de provocar este incendio de la nada cuando ellos entienden muy bien lo que esto significa para China", dice el ministro de Exteriores, Lavrov.