El paquete de medidas ya está en vigor desde esta medianoche, marcada por el apagado adelantado de luces de grandes cadenas y pequeños establecimientos y la bajada de los termostatos en establecimientos y edificios públicos.
Las comunidades gobernadas por los populares solicitan la eliminación parcial mientras Génova deja la puerta abierta a que lo recurran. Euskadi y Cataluña reclaman mayor flexibilidad a la hora de aplicar las medidas.
El lehendakari lamenta que no se hayan contrastado las sanciones ni haber sido consultado. Madrid se queda como la única comunidad que no quiere aplicar algunas de las medidas del plan.
El vicepresidente de la Comunidad explica que aún no han analizado al completo el real decreto aprobado por el Consejo de Ministros, tras insistir en que consta de 84 páginas.