Grupos fascistas españoles han invitado al homenaje de la muerte de Franco y de Primo de Rivera a grupos nazis y fascistas de todo el continente europeo.
Allí estaban, en El Pardo, condenados a ser quemados, unos 60 carretes. Franco quería documentar cada actividad que hacía y se hacía acompañar por uno o dos fotógrafos. Hubo que domar película que llevaba sesenta años enrollada y escrutar con mucha atención, porque lo que veíamos era difícil de creer.