Cazador de sombras
Ventanas indiscretas
Hay fotógrafos metódicos que dedican a cada composición horas y que crean una imagen controlando cada uno de los detalles de la luz y la composición. En el lado opuesto, los hay que salen armados con sus cámaras, hambrientos de imágenes, como un cazador en busca de presa. No saben dónde ni cuándo encontrarán esa imagen, no conocen el lugar, la luz, el 'modelo'. Pero en un momento dado se toparán con él y dispararán sin dudarlo, sintiendo el riesgo y la emoción de convertirse en cazador cazado.
A esa estirpe de fotógrafos francotiradores, viscerales, arriesgados y de mirada rápida y certera pertenece Billy Gomez. Se ha convertido en un testigo creativo y activo de las calles de Seúl. Sus habitantes son el motor de su obra, con sus prisas, rutinas, abatimientos y soledades grabadas en el rostro. El metro, el tren o las calles son sus escenarios habituales. Como en esta imagen, las personas que fotografía están solas, abstraídas, y con expresión de derrota, como si estuvieran presos de una vida que no es la que habían soñado. Miran por las ventanas para escapar con la imaginación, pero lo que ven a través del cristal son otros seres solitarios y perdidos como ellos.
Billy es consciente de que con su cámara va a robar instantes tristes e íntimos en lugares públicos sin permiso previo, y eso tiene sus riesgos. Pero también eso convierte el momento del disparo en algo emocionante, imprevisible y turbador. Con su voyeurismo sensible y lírico va convirtiendo en arte todo lo que mira.
Sus fotografías están tratadas para potenciar el aislamiento de los seres humanos que retrata. Viñeteando la imagen, oscureciendo los bordes, los retratados terminan rodeados de sombras. Con su cámara inmortaliza a esos habitantes tristes y su voyeurismo tiene algo de taxidermia de hombres y mujeres anónimos.
Billy Gomez (Los Ángeles, 1971)
De origen norteamericano, en 2005 se traslada a Seúl para enseñar inglés. Su trabajo le deja mucho tiempo libre y pronto decide emplearlo en hacer fotos. Tras unos primeros años de tanteo, de experimentación y búsqueda, va definiendo su estilo, una combinación de voyeurismo y retrato espontáneo. El resultado es una radiografía lúcida y triste de una ciudad, Seúl, y de sus habitantes.
Con un tele, un 50mm y, últimamente, con un Iphone que le hace pasar desapercibido, se lanza a las calles en busca de la luz y el momento perfectos. No poder controlar la luz como en un estudio hace que los procesos de posproducción sean más laboriosos. La búsqueda de la luz adecuada es ahora una de las prioridades de este poeta visual de las calles de Seúl, de este cazador de luces y, sobre todo, de sombras.
Flickr: www.flickr.com/photos/billygomez/
Web: www.billygomez.net
twitter/instagram: @billygomez
© Fotografía: Billy Gomez
© Texto: Luis Mariano González