Harvard da con el cóctel antienvejecimiento

La pregunta del millón para la comunidad científica parece que ha dado un paso más hacia su resolución. ¿Se puede retrasar el envejecimiento? Para dar respuesta a esta pregunta, miles de científicos durante años han trabajado para lograr acercarse lo máximo posible al 'sí', pero hasta ahora no se había llegado tan lejos.

Una investigación llevada a cabo por científicos de Harvard, ha resuelto que el envejecimiento puede ser revertido, al menos en roedores y primates no humanos, con quienes se han elaborado pruebas y han respondido favorablemente. 

Pese a que siempre se suele hablar de que ciertos alimentos y vitaminas pueden favorecer que el envejecimiento natural pueda detenerse hasta cierto punto, la realidad es que esos productos pueden hacerlo aparentemente al tonificar la cara, mejorar el aspecto físico, disimular la edad, mejorar la salud... Pero no en un sentido estrictamente científico.

Esta vez, la Universidad de Harvard ha podido demostrar cómo retrasar e incluso revertir el envejecimiento, al lograr duplicar la vida de unos ratones de laboratorio y tras más de una década de investigación.

Según informó David Sinclair, autor principal del artículo, este estudio es "el primero que muestra el cambio epigenético como el principal impulsor del envejecimiento en los mamíferos”. La epigenética hace referencia a la forma en la que se organiza y regula el ADN, y esto puede provocar -como han comprobado- un retraso considerable en el envejecimiento de un organismo.

También en primates

En el estudio se informa de que se han hallado hasta seis cócteles químicos que pueden "restaurar un perfil de transcripción de todo el genoma juvenil y una edad transcriptómica inversa" en menos de una semana.

Para dar con estos resultados y tras comprobar que había funcionado con los ratones, pasaron a hacer lo propio con primates. "Esperamos que estos resultados se vean como un punto de inflexión en nuestra capacidad para controlar el envejecimiento", sostuvo Sinclari, que también destacó que esta investigación había podido, por primera vez, controlar la edad biológica de un animal complejo, impulsarlo hacia adelante y hacia atrás a voluntad".

Esta conclusión ha sido avalada por los resultados, ya que, al modificar el genoma de los roedores, los científicos pudieron envejecer y rejuvenecer genéticamente a los ratones, de modo que, si este proceso puede demostrar su efectividad en los humanos, se trataría de uno de los grandes avances de la historia para comprender el funcionamiento de la genética humana.