Adiós a los madrugones: científicos revelan el lado perverso de despertarte temprano cada día
Y tiene mucho que ver con el estrés.
Hay quienes piensan que madrugar es un gran hábito para empezar bien el día. De hecho, la Universidad de Texas, en Estados Unidos, demostró que los estudiantes que estaban despiertos a las primeras horas del día tenían un mejor rendimiento académico. Para realizar dicho estudio se hizo una encuesta a más de 800 alumnos a los cuales se clasificaron en dos grupos: los nocturnos y nos matutinos dependiendo de a qué hora se sentían más activos para hacer sus tareas.
Claro, que no todo es positivo para los madrugadores.
Hay que recordar que en 2016 un estudio de la Universidad de Westminster (Reino Unido) encontró algunos efectos negativos para nuestro organismo en eso de levantarse al amanecer.
En dicha investigación participaron 42 personas a las que se tomaron muestras de saliva cada 8 horas durante dos días. El análisis de estas muestras determinó que las personas que se levantaron entre las 5.30 y las 7.30 tenían niveles más altos de cortisol —hormona directamente relacionada con el estrés— que el resto y se mantenía así durante todo el día, lo que también les predisponía a sufrir dolores de cabeza, dolores musculares y resfriados.