El motivo por el que cada vez más gente echa azúcar a sus flores
Todo el mundo conoce el truco de la aspirina para alargar la vida de las flores y plantas. Pero hay un truquito más fácil y efectivo que pocos conocen.
Cuando compramos o nos regalan flores es muy habitual recurrir al truco de añadir una aspirina al agua para intentar que duren en buen estado lo máximo posible, aunque muchas personas desconocen por qué se hace.
"Si dejamos una flor en un jarrón durante muchos días y no vamos a tocar el agua, para que no se corrompa y genere bacterias, se le puede añadir una aspirina en el jarrón", ha explicado Antonio Martínez, vicepresidente de Interflora España, en la COPE.
El experto dio además un truco para que duren más que con la aspirina. Consiste simplemente en "echarle un poco de azúcar al agua, que les aporta nutrientes y hace que aguanten más".
Además, recomendó cambiar el agua del jarrón cada dos o tres días, también con el objetivo de que perduren lo máximo posible.
En el caso concreto de las rosas, la clave que dio es cortar los tallos un par de centímetros cada dos días y cambiar el agua, para que así estén frescas. Además, hay que evitar que las hojas toquen el agua.